Los Yolo: solo se vive una vez
Cada cierto tiempo los científicos sociales o los marketeros les ponemos nombres a las generaciones sea para estudiarlos socialmente o para segmentarlos por mercado.
Antes fueron la generación Z, X e Y, etc, pero hoy ha salido una nueva llamada la generación Yolo, que significa; You Only Live Once o solo se vive una vez, aterrizado a nuestro criollismo: “vive la vida y no dejes que la vida te viva”, es decir, son personas que basan su forma o filosofía de vida en la reconocida frase de Susy Díaz.
Según un estudio de Ipsos, unos 4.4 millones de personas en el Perú aseguran tener esta filosofía de vida actualmente, la cual se ha repotenciado desde la pandemia. Sin embargo, para entender a los Yolo no se les debe
mirar solo como una condición de generación, ni de niveles económicos u ocupaciones, sino como una filosofía de vida de la persona. Además, viven bajo un pensamiento “open mind” aparentemente más abierto, ya que están en búsqueda de nuevas experiencias y en general por todo aquello que les de interés.
Pues, no se ven muy interesados ni preocupados por temas que atañen a la sociedad en su conjunto como la inseguridad, la economía, la coyuntura política, etc., ya que consideran que todos estos problemas y la crisis
política y social que atraviesa el Perú en algún momento va a culminar, por lo que apuestan más a sus planes.
Discrepo de los estudios que aseguran que los Yolo son ahorradores inteligentes con planes de financiamiento estructurados, pues comprobado está que un Yolo tiene en un año más gasto que de ahorro, lo que no sucede con el peruano promedio, a pesar que lo haga por obligación.
Quizá esto se explique con que las generaciones anteriores formalizaban compromisos y relaciones a una edad más temprana, y se formaban familias, lo que provocaba que el joven se pusiera las pilas y buscara un patrimonio para poder cuidar a su familia. Hoy un Yolo muestra interés en temas como la tecnología, experimentar nuevas
emociones, ya que no ven el retiro cercano, y es por eso, que solo se preocupan por generar un patrimonio a corto plazo, no por cuidarlo.
Los Yolo mientras tenga su frappé en mano, el iPhone del momento, y las redes para interactuar de forma ficticia como el cyber mundo, se contentarán pues las deudas económicas y sociales y sobre todo las responsabilidades ya se saldarán en un futuro que ni ellos saben si llegará.
En resumen, me parecen y espero errar, un grupo de personas que no quieren batallar y que quieren la recompensa antes del esfuerzo.
(*) Periodista y sociólogo