Opinión

Perú: El hábitat ideal de un lagarto

Por: Camila Craig

Los lagartos son criaturas oportunistas que pueden sobrevivir en distintos ambientes y alimentarse de diferentes potajes según la especie y el tamaño. Hay varios tipos de lagartos y lagartijas para cada eventualidad. Estos aprovechan los recursos naturales que tienen a su alrededor para asegurar su supervivencia por encima de otras criaturas; incluso, por encima de su misma especie. Esto aplica también a la política doméstica y mundial.

Cuando el lagarto mayor, Martín Vizcarra, fue vacado a finales del año pasado por ineficacia gubernamental, comenzaron a caer las lagartijas que lo acompañaban en su rol en el Ejecutivo. Fue poco después cuando, bajo el mandato de Francisco Sagasti, salió a la luz el caso “Vacunagate”, que implicaba la vacunación irregular de más de 487 funcionarios políticos y allegados a los estudios de la famosa vacuna de la farmacéutica china, Sinopharm.

Esto obligó al Estado a romper el nexo monopólico que se tenía con el laboratorio asiático, ya que se puso en cuestionamiento la eficacia de esta vacuna y los resultados de los estudios farmacológicos. Lo cierto es que las prolongadas negociaciones de Sagasti con los distintos laboratorios alrededor del mundo están costándole la vida a miles de peruanos día tras día.

Con más de 1 millón y medio de casos y 53, 411 muertes en lo que va de la pandemia, el Perú se ha convertido en uno de los países que peor ha manejado la crisis del Covid-19 a nivel mundial. Solamente el 1% de la población está completamente vacunada y la cantidad de muertos por millón de habitantes supera a casi todos los países de la región. Sin duda alguna, esta situación desnuda las falencias del sistema político y hospitalario de nuestro país.

Los lagartos vieron venir el colapso de todo el sistema de salud y tomaron sus precauciones. La vacuna es tan indispensable como el agua en estos tiempos de crisis. Sin embargo, el tiempo ha demostrado que la muerte le es indiferente a todo nivel socioeconómico y buena voluntad. Mientras unos pocos se salvan, hay una cadena de ineficacia que arrastra y desgracia la vida del ciudadano promedio.

La prensa extranjera nos ha reconocido como uno de los países que peor ha manejado la pandemia del Covid-19 y no es para menos. Lo certero es que los culpables existen y estamos muy cerca de destronarlos, con la ayuda de la prensa de investigación independiente, el voto ciudadano y el poder de la democracia, es posible abogar por la vida y tener esperanzas. Aunque el panorama se muestre aterrador hay que recordar que los lagartos nunca encabezan ni han encabezado la cadena alimenticia.

(*) Periodista

(*) La empresa no se responsabiliza por los artículos firmados.

Related Articles

Agregue un comentario

Su dirección de correo no se hará público. Los campos requeridos están marcados *

Check Also
Close
Back to top button