“En Las Bambas se está imponiendo la fuerza bruta”
Exministro de Energía y Minas, Carlos Herrera Descalzi, pide mano firme del Gobierno para solucionar un conflicto que perjudica a todos los peruanos
Carlos Herrera Descalzi señala que la paralización de Las Bambas también perjudica a los ciudadanos pues el dinero que deja de recibir el Estado lo tiene que obtener de impuestos o deja de hacer obras.
POR: CARLOS RIVERO
Ni las mesas de diálogo en Apurímac, ni las reuniones de los comuneros con miembros del Ejecutivo en Palacio de Gobierno han solucionado el conflicto en Las Bambas, que, según la minera, ha generado pérdidas de hasta US$400 millones en exportaciones. En medio de esta complicada situación, el exministro de Energía y Minas, Carlos Herrera Descalzi, pide mayor acción por parte del Gobierno.
¿Ingeniero, cómo ve usted el conflicto en Las Bambas?
Lo normal en una sociedad es que si dos partes tienen entre ellas un conflicto van a un Poder Judicial y este define. El problema en el Perú es que el Poder Judicial se tarda montones de años y hay una corrupción muy fuerte. Entonces, es una vía a la que las partes no acuden porque saben que se meten en un gran problema. En el caso Las Bambas están imponiendo la fuerza bruta.
¿Se refiere al bloqueo de vías y ataque a la propiedad privada?
Lo que no se puede aceptar es que la solución a un conflicto sea la violencia, que cada parte quiera hacer justicia por sí misma. En Las Bambas y demás casos mineros está de por medio la violencia. Dicen, “yo hago justicia por mano propia”.
¿Considera que el Estado no está actuando como debe?
Hay inacción del Estado. ¿Por qué? Porque la sociedad no lo respalda. Si, por ejemplo, una de estas comunidades fuera repelida por el Estado van a decir “ha habido muertos”. Lo que está mal es que el Estado y la sociedad nos hayamos acostumbrado a que el bloqueo de vías y la invasión a la propiedad privada sea moneda corriente. Es un delito, pero la ley no se aplica para ellos. La Policía tiene la obligación de intervenir. Se necesita un poco más de mano firme.
La minera señala que debido a la inoperatividad de la mina se perdieron US$400 millones en exportaciones y más de US$200 millones en rentas para el Perú y la región Apurímac.
Las perdidas afectan bastante al país. Todo eso ya se perdió. Pero esto va más allá, porque se está afectando los derechos de la población. El ciudadano no se da cuenta porque no lo percibe directamente, pero sí les afecta porque es dinero que deja de entrar al Estado. Es decir, no es solo dinero que pierde la empresa y el Estado, pierden también las personas que dejan de tener ingresos. El dinero que pierde el Estado lo va a sacar de otro lado, o lo saca con impuestos o se va a dejar de hacer obras.
¿Considera que esto se vaya a solucionar a través del diálogo?
No se va a solucionar por la vía del diálogo. Veamos, ¿quién paga los viajes de sus representantes a Lima? No creo que los paguen ellos, los paga el Estado o alguien más. Ellos no pierden nada, a ellos no les representa un costo. Quien pierde es la mina y la sociedad peruana, entonces ellos pueden mantenerse todo el tiempo del mundo así.
¿Entonces, en este caso se debe usar la fuerza?
El Estado siente que no puede usar la fuerza por el tema político. Este Gobierno piensa que el pueblo son solo las comunidades, y para ellos, la clase media no es el pueblo. Al no usar la fuerza, las comunidades van a empujar hasta donde puedan. La empresa siente que ya no puede ceder más porque las comunidades encuentran en esa acción una forma de vida. Vemos que el Estado no es capaz de garantizarle a la empresa que siga operando.
¿Se entiende el reclamo de las comunidades en Las Bambas?
Las comunidades piden lo que quieren. En Las Bambas ellos vendieron sus terrenos hace mucho tiempo. Seguramente les pagaron más poco que mucho, pero esa fue una transacción legal. Tiempo después dijeron que les había pagado poco y debían renegociar. La empresa, para seguir aperando, accedió. Ahora están pidiendo lo mismo. No tiene sentido.
“LA MASIFICACIÓN DEL GAS NO SE HA REALIZADO”
Respecto al incremento del precio de los combustibles en los grifos, señaló que esto se debe al alza de los precios internacionales y que en el Perú se paga un precio muy alto. “No hemos podido salir de la dependencia del petróleo. Cuando se firmó lo del gas de Camisea la razón era salir del tema del petróleo. La masificación del gas no se ha realizado y dependemos cada vez más del petróleo. Importamos casi 250 mil barriles al día y producimos 40 mil”, indicó el exministro de Energía y Minas.
“SE LE QUITA AL PERÚ EL ATRACTIVO PARA INVERSIONES”
Para Carlos Herrera, esta situación que se vive en Las Bambas le quita al Perú el atractivo para las inversiones. “El atractivo que tiene nuestro país es su geología, debido a su riqueza mineral. En medio de esta crisis mundial de los alimentos y el combustible, el Perú se debería favorecer por el lado de los minerales”, señaló.
De otro lado, dijo esperar a ver los resultados del trabajo de la nueva ministra de Energía y Minas, Alessandra Herrera. “Peor que el anterior ministro no creo que sea”, añadió.
