La crisis política que actualmente azota a nuestro país tiene una de sus manifestaciones en la solicitud de vacancia presidencial a Pedro Castillo por incapacidad moral. Y esto nace como consecuencia de una serie de actos cometidos por el Gobierno que lindan con lo prohibido, lo incorrecto y hasta lo repugnante desde el punto de vista de la conciencia ciudadana.
Prueba al caso tenemos el manejo del Gobierno en la lucha y combate contra la erradicación del narcotráfico. O la intervención arbitraria del presidente de la República de manera directa o a través de terceros, para los nombramientos de altos mandos de las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional del Perú. Otro caso escandaloso son los nombramientos de personas que no solamente carecen de la expertis, sino que, además, no tiene curriculum vitae sino un prontuario, amén de haberse rebajado los requisitos para sus nombramientos.
Sin embargo, no es bueno que el país viva en permanente tensión en relación a la vacancia presidencial; lo deseable es que esta (la vacancia) no se presente y que podamos regresar a la normalidad. Si esa fuera la salida, formalmente esta debe ser presentada cuando se reúnan las condiciones de forma y de fondo, jurídicas y políticas y estas son: primero la existencia de un hecho objetivo. Segundo, que ese hecho tenga una naturaleza de connotación moral. Tercero, que se analice la conveniencia o necesidad de adoptar una medida como esa. Cuarto, que exista el consenso parlamentario suficiente. Quinto, que la ciudadanía sintonice con el razonamiento del Congreso de la República. Sexto, que se le otorguen todas las garantías del proceso al imputado.
La existencia de la figura de la vacancia presidencial en los últimos años se debe, fundamentalmente, al fenómeno Vizcarra quien distorsionó el sistema de balances y de separación de poderes; y es por eso que lo que vivimos hoy es una consecuencia más de los desbarres del vizcarrismo.
El pedido de la congresista Chirinos nació de manera individual, incluso sin consultar a su propia bancada y ha ido creciendo hasta contar con el apoyo de las bancadas de Renovación Popular, Fuerza Popular y de la suya propia (Avanza País). Habrá que esperar cual será el comportamiento de otras agrupaciones como Alianza para el Progreso y Podemos Perú. Nos esperan días de definiciones.
(*) Expresidente del Tribunal Constitucional
(*) Exministro de Justicia
(*) La empresa no se responsabiliza por los artículos firmados.
