El 20 de marzo de 2022 el programa Panorama demostró que la exministra de Trabajo, Betssy Chávez, había hecho su tesis para optar el título de abogado con un trabajo plagiado que tuvo 49% de coincidencias con otros trabajos, y fue sustentado ante la Universidad Jorge Basadre Grohmann en el 2014.
El 3 de abril una investigación del programa Cuarto Poder concluye que la tesis del ministro de Educación tiene más del 70% de coincidencias con trabajos de otros investigadores. Su tesis doctoral fue sustentada en 2019 ante la Universidad Enrique Guzmán y Valle.
El 1 de mayo, nuevamente Panorama demuestra que la tesis ya no de un ministro de estado, sino del mismo presidente de la república tiene 54% de copiado de otras investigaciones y textos de diferentes autores; este trabajo del presidente tenía coautoría que involucra a su esposa, la señora Lilia Paredes. Este proceso de plagio al que se le llama tesis fue sustentado ante la Universidad Cesar Vallejo, propiedad de Cesar Acuña.
A este selecto grupo de personajes también se integra Zoraida Avalos, la ex fiscal de la nación que el 17 de febrero en el programa Milagros Leiva Entrevista se conoce que tenía diplomados y cursos falsos que fueron presentados al entonces Consejo Nacional de la Magistratura para lograr el alto cargo que después obtuvo. La entidad llamada LIBREJUR emitió certificados a favor de Avalos, y que ahora dice haber desechado toda la documentación de la referencia.
Por una simple cédula de notificación la Universidad Católica decidió responsabilizar a Eloy Espinosa-Saldaña Barrera por haber incurrido en la falta disciplinaria, tipificada por el numeral 21 del Anexo 1 del Reglamento Unificado de Procedimientos Disciplinarios de la PUCP, que dice “Cometer plagio o cualquier otro acto análogo, presentando ideas ajenas como si fueran propias, sin respetar los derechos de autor de un tercero”. Y esto está calificado como una falta grave.
Con esto Eloy Espinoza-Saldaña se pone al nivel de José García Marcelo el ex miembro del Tribunal Constitucional que validó la denominada ley de interpretación auténtica que permitía la re reelección de Alberto Fujimori. La única diferencia entre ambos personajes es que García Marcelo renunció a su cargo antes de la inminente destitución, el otro esperó su notificación.
La PUCP esperó que Espinoza-Saldaña dejara de ser magistrado del TC, y para salvaguardar su prestigio institucional lo separó y sancionó con dos semestres sin goce de haber; mientras que la Universidad de Acuña validó el 12 de mayo último con imprecisiones la tesis del mandatario y su esposa, y posteriormente el 26 de junio en el programa Sin Medias Tintas se da a conocer que aquella Universidad informó a la SUNEDU que el trabajo del presidente tiene una similitud con otros similares en un 86%.
El plagio es un delito tipificado en el artículo 219 del Código Penal que atenta contra el derecho de autor, su ejecución y materialización tiene como fundamento el uso del engaño para llegar a un determinado fin en beneficio del plagiario.
El conocimiento de estos casos se lo debemos a la prensa; ahora esperemos el debido proceso y las investigaciones para que se sancione ejemplarmente este tipo de fraude que es más grave cuando es realizado por personas que pretenden ser autoridades.
(*) Abogado y excongresista
(*) La empresa no se responsabiliza por los artículos firmados.
