Opinión

La jerga de la corrupción

Por: Martín Valdivia Rodríguez

Una “luca gringa” era, quizá, la jerga más usada en el mundo de la corrupción y el hampa. Significa “mil dólares”. Sin embargo, como en sus modalidades, los audios de Luciana León, excongresista del Apra, nos demuestra que en la jerga de la mafia también hay innovación.

Denunciada por la presunta comisión, en calidad de autor, de los delitos de tráfico de influencias agravado, organización criminal, cohecho pasivo impropio y peculado doloso por apropiación en agravio del Estado peruano, Luciana León enriquece el repertorio de la jerga de la corrupción con palabras como “chapitas”.

“Le digo ¿5 chapitas? Borra, bebé”, le escribe Luciana León a su esposo. La excongresista le pregunta si pide 5 mil dólares, nada menos. En la jerga antigua se habría dicho “5 lucas gringas”. El diálogo, por cierto, también demuestra que la corrupción sigue vivita y coleando, que anteayer cambiaron las caras, pero no lo delitos. Igual que ayer y tal vez que hoy. Todo indica que Luciana no es un caso aislado, que los corruptos siguen haciendo de las suyas. En las conversaciones difundidas también aparece el exministro de Economía y Finanzas del gobierno de PPK, Alfredo Thorne.

Los “faenones”, las “aceitadas” y los “honorarios de éxito” del gobierno del Apra continuaron en los siguientes gobiernos y todo indica que llegaron hasta la actualidad. Ahora se llaman “chapitas” y “tamales”. Que investiguen a fondo, con imparcialidad, a los corruptos de ayer y hoy. Nada de “loncheras” ni “tappers”. Que nadie se escape.

No por nada en estos días pesa sobre el actual Jefe de Estado, Pedro Castillo Terrones supuestos actos de corrupción de su gobierno en apenas ocho meses de haber tomado el mando, lo cual no parece ajeno a los mandatarios que nos gobernaron los últimos treinta años, como ocurrió en las diversas gestiones de Alberto Fujimori, Alejandro Toledo, Ollanta Humala, PPK, Martín Vizcarra, entre otros.

Realmente llegar a la presidencia de la República, parece haberse ganado uno la lotería o en todo caso llegar a la repartición de un botín, porque tanto los mandatarios de turno y hasta los congresistas buscan sacar provecho para su molino aprovechándose del cargo público que ejercen, no por nada el parlamento nacional tiene el 82 % de desaprobación por la población. Porque lo que digo y escribo siempre lo firmo.

 

Related Articles

Agregue un comentario

Su dirección de correo no se hará público. Los campos requeridos están marcados *

Back to top button