Pese a su importancia, el tema de la educación no fue considerado en el debate de equipos técnicos. La educación peruana estaba en crisis desde mucho antes del inicio de la pandemia y ahora, con la deficiente aplicación del programa ‘Aprendo en Casa’ del Gobierno, el nivel debe haber empeorado. Decía Aristóteles que “la educación es el ornamento de la prosperidad y un refugio de la adversidad”. En otras palabras, eso significa que la educación no es solo una herramienta clave para el desarrollo de la humanidad en contextos de estabilidad social, sino que también actúa como un escudo que nos protege en épocas de angustia e incertidumbre, como el momento actual.
Sin embargo, el Jurado Nacional de Elecciones (JNE), como organizador, y los representantes de Perú Libre y Fuerza Popular, que coordinaron los temas a tratar en el debate de ayer, no lo consideraron así. Una pena. La salud, la economía, la seguridad ciudadana y los demás tópicos que se abordaron anoche son muy importantes, de eso no cabe la menor dura, pero la educación también lo es.
No hay mucho que pensar para llegar a esa conclusión. La educación es el tema que está más directamente relacionado con los dos grupos etarios más perjudicados por la pandemia: la niñez y la juventud. Por eso no se entiende por qué no fue considerada como bloque temático por el JNE, que se supone tiene experimentados especialistas en temas políticos, sociales, económicos y culturales. Otro grave error del máximo organismo electoral.
La última prueba PISA (Programa para la Evaluación Internacional de Estudiantes, por sus siglas en inglés) se realizó en 2018 y Perú ocupó el puesto 64 de 77 países. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) realiza ese estudio cada tres años, pero en el presente tendrá dificultades para hacerla debido a la pandemia. Es importante, por lo tanto, que el Ministerio de Educación evalúe la eficiencia de las clases virtuales sobre la base del nivel educativo de los estudiantes. Es decir, que determine en qué aspectos del proceso enseñanza-aprendizaje se puede mejorar. Y eso, definitivamente, compete principalmente al próximo gobierno. Esperamos que se corrija esta aparente visión equivocada de los entes que tienen bajo su responsabilidad la administración del sistema educativo. Porque lo que digo y escribo siempre lo firmo.
