Opinión

Futuro esperanzador del tenis peruano

Por: Hans Berger

El sábado 3 y el domingo 4 de febrero, en Santiago de Chile, se disputó el pase a la Fase de Grupos de las finales de la Copa Davis entre Perú y Chile. Nuestro equipo estuvo formado por Juan Pablo Varillas (puesto 83 en el ranking ATP), Ignacio Buse (443), Arklon Huertas del Pino (586), Conner Huertas del Pino (679) y Gonzalo Bueno (321), mientras que el equipo chileno estuvo conformado por Nicolás Jarry (20), Alejandro Tabilo (53), Tomás Barrios (117), Christian Garin (88) y Gonzalo Lama (518).

El Capitán de Perú fue Luis Horna y el de Chile Nicolás Massú. Las posiciones en el ranking ATP, sumado a la localía, daban como favorito al equipo chileno que contaba con tres jugadores en el “Top 100” mientras que nosotros sólo teníamos a uno dentro de dicho selecto grupo de tenistas.

No soy amigo de ensalzar las derrotas, sin embargo en este caso considero pertinente destacar el desempeño de Buse y los hermanos Huertas del Pino, así como la sapiencia de Lucho Horna. En el primer partido, un irreconocible Juan Pablo Varillas perdió 2 – 1 con Alejandro Tabilo luego de haber ganado el primer set. El segundo partido enfrentaba a Nicolás Jarry con Ignacio Buse.

La gran diferencia en el ranking ATP sugería un triunfo contundente de Jarry, sin embargo Buse se llevó la victoria por 2 – 1, dando la gran sorpresa y dejando empatada la serie.

En dobles, los hermanos Huertas del Pino dieron la segunda sorpresa al derrotar a la dupla chilena conformada por Tabilo y Barrios, con lo que Perú se puso a un punto de pasar a la siguiente fase de la Copa Davis. Lamentablemente Varillas perdió indiscutiblemente con Jarry 2 – 0. Luego jugaría Buse con Tabilo siendo derrotado por 2 -1 dándole gran pelea al mapochino.

Buse tiene que seguir puliendo su juego, como es mejorar su saque. A muchos sorprendió que la segunda raqueta peruana fuera Ignacio Buse y no Gonzalo Bueno que venía de ganar el Challenger 50 de Buenos Aires. Horna consideró que el juego de Buse se adaptaba mejor a la superficie rápida.

El futuro del tenis peruano está en buenas manos, tenemos dos jugadores de 19 años (Buse y Bueno) que tienen mucho más para dar y a Juan Pablo Varillas que debe recuperar su mejor juego.

Se esperaba más de él en Santiago. En dobles, la dupla conformada por los hermanos Arklon y Conner Huertas del Pino demostró que se entienden muy bien y pueden ganar a cualquier dupla. En setiembre Perú deberá jugar con Suiza para revalidar el pase a las Qualifiers del 2025 y tiene equipo para lograrlo. Ojalá nuestros jugadores lleguen en su mejor momento.

(*) Periodista deportivo

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