Opinión

El campo produce cada vez más, pero la ciudad consume cada vez menos

Por: Fernando Cillóniz Benavides

El Ministerio de Agricultura – este de los seis ministros en 15 meses – no sirve para nada. ¡Tras cuatro intentos de compra de urea… hasta ahora ¡cero puntos, cero balas! Sólo anuncios apocalípticos, expectativas sobrevaloradas y finalmente… crueles frustraciones.

Por otro lado, la urea jamás iba a equipararse al agua como determinante de la producción agrícola. Como que – gracias a Dios – tuvimos agua a lo largo del año. Tuvimos agua para la campaña agrícola 2021 / 2022 y tuvimos agua en los reservorios de todo el país. O sea, tuvimos garantizada la siembra – y primeros riegos – de la campaña 2022 / 2023. La cual – dicho sea de paso – viene bien y sin contratiempos.

Sólo si no lloviera en la temporada de lluvias venidera – entre diciembre y abril entrantes – caería la producción agrícola el año próximo. Lo cual, es poco probable. Al menos, si se repitiera el régimen pluvial de los últimos años, no tendremos ningún problema de escasez de agua.

El hecho es que – hoy por hoy – más de la mitad del mundo está en sequía… y de la brava. Sin embargo, nosotros tenemos agua. Y por ende, la producción alimentaria está creciendo en el país.

Dicho esto, quisiera referirme a la paradoja que estamos viviendo los peruanos actualmente: el campo produce cada vez más… pero la ciudad consume cada vez menos. Y el campo produce cada vez más porque – aparte de agua – tenemos buen clima, tierras fértiles, gente brillante y trabajadora, tecnología, etc. Y un mercado mundial enorme que demanda muchos productos de nuestra agricultura: frutas, hortalizas, granos andinos, café, cacao, etc. Incluso, los precios de algunos cultivos como café, algodón, maíz, caña de azúcar, papa, trigo, etc. han subido mucho últimamente, en favor de los agricultores. ¡Por eso producimos cada vez más, en el campo!

Sin embargo, nuestras ciudades consumen cada vez menos. Me refiero a la ciudadanía que consume cada vez menos alimentos. ¿Por qué?… habría que preguntarnos. ¿Por qué nuestra población urbana consume cada vez menos alimentos? ¿Por qué la proliferación de Ollas Comunes? ¿Por qué está aumentando la mendicidad callejera? ¿Por qué crece tanto la delincuencia en el país? ¿Por qué?

Pues porque la gente no tiene plata. Pero ¿por qué la gente no tiene plata? Porque no hay trabajo. Pero ¿por qué no hay trabajo? Porque no hay inversión. Y ¿por qué no hay inversión? Pues porque el gobierno – lejos de promoverla – la traba. ¿Cómo así? Designando a delincuentes para ocupar cargos ministeriales. Y luego, cambiándolos a cada rato. Robando descaradamente en las adjudicaciones de obras públicas. Rigidizando la legislación laboral. Etcétera. ¡Por eso no hay trabajo!

¡Por eso la pobreza está creciendo! ¡Por eso la proliferación de Ollas Comunes! ¡Por eso la mendicidad callejera! ¡Por eso la delincuencia rampante! ¡Por eso las ciudades consumen cada vez menos alimentos… mientras que el campo produce cada vez más!

(*) Ex gobernador regional de Ica

* La Dirección periodística no se responsabiliza por los artículos firmados

Related Articles

Agregue un comentario

Su dirección de correo no se hará público. Los campos requeridos están marcados *

Check Also
Close
Back to top button