Opinión

Castillo sin remedio

Por: Víctor García Toma

La reciente encuesta de Ipsos demuestra que, de manera galopante, el presidente de la República, Pedro Castillo, ha perdido ya el lazo que tuvo al momento de ganar las elecciones. Hoy, en un porcentaje muy elevado, la ciudadanía solo espera de él la renuncia o, inclusive, la vacancia. Mientras esa situación eventualmente se produce, el Perú vive horas de desanimo e incertidumbre. Corresponde ahora al Congreso de la República asumir un primer reto: el otorgar o no otorgar la confianza al nuevo Gabinete. Este nuevo Gabinete está encabezado por una persona poco propicia para el cargo fundamentalmente porque carece de las dotes y habilidades para concertar, para aunar esfuerzos y, fundamentalmente, porque se trata de un hombre de confrontación.

A eso hay que sumarle que se trata de un Gabinete sin brillo, sin mayores luces, pero en el cual se han colado tres o cuatro ministros que, probablemente y en otras circunstancias serían el hazmerreir de la clase política. Uno de ellos no pudo ocupar del cargo de director regional porque no reunía los requisitos, pero de súbito ahora sí puede alcanzar la condición de ministro de Estado.

El segundo es alguien que, a la par de un médico de múltiples especialidades oficiosamente hablando, aprovecha su tiempo libre para la venta de un agua milagrosa; pero existe, además, un ministro de Estado que ha venido conjugando sus labores de juez con la de abogado del presidente de la República, inclusive en horas de trabajo. Esa situación es claramente reprensible.

En fin, eso es lo que hay, eso es lo que tenemos, y sobre eso tendrá que tomar una decisión el Congreso; pero más allá de todo, como ciudadano, me atrevo a invocarle al presidente que es el tiempo de regresar a Chota, es el tiempo de abandonar el Palacio de Gobierno que es una casa muy grande para usted y, seguramente, es una casa que sicológica y emocionalmente lo agobia. Hay que regresar de donde no se debió salir. Hay que regresar al lugar donde usted pueda sentirse cómodo y no hacer daño al país.

(*) Expresidente del Tribunal Constitucional

(*) Exministro de Justicia

(*) La empresa no se responsabiliza por los artículos firmados.

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