Raúl Diez Canseco y el escándalo que lo hizo renunciar al gobierno de Toledo
Acusaron a exvicepresidente y exministro de haber beneficiado a su suegro y robarle la novia a su hijo
En varias ocasiones, Cupido ha rondado los ministerios y hecho perder la cabeza a altos funcionarios. Uno de los más sonados casos fue el que ocurrió en el 2003, cuando Raúl Diez Canseco, entonces primer vicepresidente de la República y ministro de Comercio Exterior y Turismo, tuvo que renunciar a ambos cargos tras denunciarse que, a través de un decreto supremo, benefició al padre de su exnovia, Luciana de la Fuente.
Fue en el gobierno del expresidente Alejandro Toledo, cuando la prensa reveló que, mediante una norma, Diez Canseco, miembro de Acción Popular, favoreció al negocio del padre de su pareja de entonces. Se habría exonerado del pago del Impuesto General a las Ventas (IGV) a los restaurantes que funcionan en el Aeropuerto Internacional Jorge Chávez y, por lo tanto, el padre de Luciana de la Fuente ya no pagaría la deuda que tenía con la Superintendencia Nacional de Administración Tributaria (Sunat).
La revelación desató un gran escándalo. Hasta se llegó a decir que Raúl Diez Canseco, entonces de 55 años, le había robado la novia a su hijo. Luciana de la Fuente tenía 26 años, por lo que él le llevaba cerca de 30 años. Lo cierto es que la pareja se casó en el 2008 en La Molina y luego de la boda partió a Miami. Un año más tarde, ante una comisión del Congreso, Diez Canseco señaló: “El único error que cometí fue enamorarme”.
Posteriormente, en una entrevista, Luciana de la Fuente aseguró que su esposo “no le había robado la novia a su hijo”. Añadió que “la edad es un estado mental” y que al hijo de Raúl Diez Canseco lo conoció «en una academia, cuando nos preparábamos para postular a la universidad”. Años más tarde, Diez Canseco reveló que la relación con Luciana de la Fuente había terminado. “El tema más importante hoy en mi vida es la recuperación de mi familia, en ese trabajo estoy. Es un tema privado. Estoy haciendo mucho esfuerzo para acercarme a los míos, tratando de resarcir el daño que causé”, declaró en ese entonces, según una nota de Panamericana TV. “Fue un error (la relación con Luciana), como el de mucha gente. Estoy arrepentido (…) Los errores se pagan. Quiero recuperar el tiempo perdido. No hay nada en el mundo que valga más que la familia y los hijos son lo más grande que Dios le ha dado a uno”, agregó, de acuerdo a la misma información.
RECONOCIÓ “GRAVE ERROR” Y AFIRMÓ QUE EL CASO “SE CERRÓ”
La cadena BBC registra declaraciones que Diez Canseco dio en una declaración televisiva: “Lamento profundamente haber faltado a la verdad en relación a mis afectos personales, ese grave error que hoy se ha transformado en una terrible pesadilla fue motivado por una equivocada actitud de protección a las personas involucradas”.
“Mi conducta no tuvo ninguna intención de ofender o afectar a nadie y menos aún de cometer algún tipo de irregularidades o beneficiar a algunos. Sin embargo, acepto y asumo que debí proceder de alguna otra manera”, agregó, según la información. Sin embargo, hace cuatro años, Diez Canseco le envió una carta notarial a un portal de internet para aclarar el caso se cerró y él fue declarado inocente porque el decreto no benefició a ningún restaurante del aeropuerto.
