Es verdaderamente terrible lo que ha ocurrido en Ecuador, un hermano país que se debate en tan grave crisis política y tamaña convulsión social que, en mayo pasado, obligaron al presidente Guillermo Lasso a anunciar el término adelantado de su mandato y el cierre del Congreso, lo que denominan “muerte cruzada”, para convocar a nuevas elecciones. El proceso electoral, que se realizará en menos de dos semanas, se ve ensombrecido por el asesinato de un candidato presidencial en pleno mitin de campaña.
Fernando Villavicencio, un político que se hizo conocido ejerciendo el periodismo, tenía un 10% de intención de voto y figuraba entre los candidatos favoritos para los comicios, previstos para el domingo 11 de agosto.
Uno de los atacantes fue capturado, pero murió, según dicen, como consecuencia de las heridas de bala que sufrió en el fuego cruzado con la policía. Fue un asesinato muy planificado y el objetivo, indudablemente, era el candidato. ¿Quién ordenó su muerte?
En su etapa de periodista, Villavicencio saltó a la fama al declararse enemigo jurado del expresidente Rafael Correa (2007-2017). Fue perseguido por Correa, a quien en un video se le escucha decir: “Nuestra venganza personal será contundente”. Por eso, un sector de la política ecuatoriana apunta al expresidente izquierdista y, tras el crimen, en las calles de Quito se oyó decir “Correa asesino”. Amigo de la Embajada de Estados Unidos, Villavicencio obtuvo importante información que sirvió, en su momento, para armar los juicios por los que Correa y varios de sus funcionarios fueron condenados.
Por el momento son solo especulaciones nacidas de la sospecha, pero ojalá las investigaciones permitan conocer quién está detrás del crimen. En las redes circula un meme que dice que “la izquierda en el continente asesina a sus rivales”, pues Trump (EE.UU.) es investigado y tiene tres pedidos de arresto; Bolsonaro (Brasil) y María Corina Machado (Venezuela) están proscritos; Jeanine Añez (Bolivia) y Cristina Chamorro (Nicaragua) se encuentran en prisión; y ahora Fernando Villavicencio (Ecuador) es asesinado. Lo mismo también podría decirse de Cristina Fernández (investigada), Evo Morales (obligado a renunciar) y Pedro Castillo (preso). Por lo tanto, todo está en nivel de presunción.
Pero no se puede descartar nada aún. Ojalá las investigaciones permitan pronto la identificación del autor intelectual para hacer justicia y evitar que el crimen quede impune. Por el bien de Ecuador y el continente. Porque lo que digo y escribo siempre lo firmo.
