Opinión

Presumir no lleva a nada

Por: Martín Valdivia Rodríguez

Hay profesionales que se esmeran por hacer alarde de sus títulos profesionales y se regodean cuando les dicen “doctor”, “licenciado”, etc. En realidad, muchas de estas personas, proclives a la presunción y la pedantería, no tienen la preparación ni las capacidades que les atribuyen un CV. Lo contrario ocurre con quienes son verdaderos capos en sus campos profesionales, pues no les importa en lo más mínimo que los alaben, porque para ellos lo importante es ser y no hacer creer lo que no son.

Este detalle lo comprueba con frecuencia nuestro equipo de periodistas que diariamente entrevistan a políticos, empresarios, analistas, académicos y otros personajes que, obviamente, tienen su reputación gracias a los cargos que ocuparon o desempeñan aún. Generalmente —hay excepciones, claro está—, los más informados y especializados en sus respectivos campos no tienen el menor interés que se les presente con sus títulos y se les elogie en los aburridos actos protocolares. Y, a la inversa, casi siempre, quienes se empeñan en figurar con sus pergaminos y “hazañas” tienen una preparación muy modesta y muestran una evidente precariedad intelectual.

La proclividad a las ínfulas también se da a nivel institucional. Congresistas, ministros, directores de instituciones públicas, gerentes de empresas privadas, etc., instruyen a sus equipos de prensa que adornen sus nombres con sus títulos profesionales y otros pergaminos en las notas de prensa, aun cuando ese afán ya es mal visto y tomado como un mal indicio en las salas de redacción de los medios de comunicación.

Hay ocasiones en las que estos alardes inconsistentes atañen a instituciones que se atribuyen, con exceso de vanidad, gestiones que en realidad no hicieron o son presentadas con mucha presunción y subjetividad. Por ejemplo, la Policía Nacional informaba ayer a través de sus redes sociales que “tras un trabajo de inteligencia intenso de la PNP junto al equipo especial de fiscales de la Fiscalía de la Nación, se logró la entrega del investigado Fray Vásquez Castillo, quien se encontraba prófugo de la justicia hace dos años”.

Algo no cuadra en el post de la PNP y así lo hicieron notar los cibernautas con sus comentarios: “Si se entrega, se desprende que es un acto voluntario del investigado ¿Dónde está el trabajo de inteligencia?”, “Después de un trabajo de inteligencia, se entregó. O sea, las capturas ahora son por delivery” y “¿Por qué inflan le pecho si se entregó?”. Vladimir Cerrón lleva tres meses prófugo, ¿lo capturarán o se entregará?. Ahora solo el tiempo lo dirá. Porque lo que digo y escribo siempre lo firmo.

Related Articles

Agregue un comentario

Su dirección de correo no se hará público. Los campos requeridos están marcados *

Back to top button