El exparlamentario Michael Urtecho Medina ha sido condenado por una sala de la Corte Suprema a 22 años y 5 meses de prisión atribuyéndosele los delitos de concusión y enriquecimiento ilícito teniendo que pagar una reparación civil de más de dos millones de soles; junto a él también ha sido condenada su esposa a 28 años de encierro carcelario.
Urtecho un ingeniero químico que sufre de debilidad muscular (hipotonía), enfermedad que lo tiene permanentemente postrado en una silla de ruedas y que estuvo en varios partidos políticos hasta su llegada al Congreso (Renovación Nacional, Avancemos, Unidad Nacional y Solidaridad Nacional) fue acusado por varios de los trabajadores de su despacho de apropiarse de sus remuneraciones en 2013. Lo trascendente de la pena impuesta al excongresista es que resulta sumamente desproporcionada, en comparación con casos parecidos perpetrados por otros parlamentarios y que fueron condenados ejemplarmente.
El general Edwin Donayre (APP) fue condenado a cinco años de cárcel por el delito de peculado, apropiándose del combustible destinado a la Región Militar Sur del Ejército, entre enero y agosto del 2006. Donayre estuvo prófugo y su captura obedeció a un fino trabajo de la inteligencia policial.
Zacarías Lapa Inga, (Frente Amplio) fue sentenciado a cuatro años, ocho meses y un día de prisión efectiva al cometer el delito de negociación incompatible o aprovechamiento indebido del cargo en agravio del Estado. José Anaya Oropeza (nacionalista) fue condenado a cinco años de cárcel en el 2011 por falsificación de documentos y peculado, es a quien se le conoce como “come pollo”. Miro Ruiz Delgado (nacionalista) condenado a 5 años de prisión efectiva por tenencia ilegal de armas y daños agravados contra Walter Cárdenas Patiño, dueño de un perro al que mató de tres disparos, a este se le conoció como “mataperro”.
Los excongresistas Celia Anicama (nacionalista) cuya empresa de tv captaba las señales de canales extranjeros y brindaba servicios de cable sin pagar los derechos (roba cable); Amado Romero Rodríguez (nacionalista) quien exigía a los mineros informales pagos en oro (come oro) y el de Margarita Sucari (nacionalista) que fue grabada exigiendo a una trabajadora que le diera parte de su sueldo, solo tuvieron suspensiones. Aún están pendientes de sentencia definitiva el caso de los Mamani videos, en que Kenji Fujimori, Guillermo Bocángel y Bienvenido Ramírez fueron “comprados” para evitar la vacancia de Pedro Pablo Kuczynski en marzo de 2018.
El diputado fujimorista Vladimiro Zegarra, ebrio y molesto porque no lo trasladaban a su domicilio en vehículo policial, mató de un balazo en 1991 al policía Abraham Román Galiano y fue condenado a 10 años de prisión.
A Urtecho se le condena a más de 22 años por recortar sueldos y Zegarra es condenado a 10 por matar a un policía; los jueces de Urtecho lo condenan a una reparación económica de 2’407 millones de soles por enriquecimiento ilícito y otro monto menor por concusión. No creo necesario comparar lo que estimaron los jueces de Zegarra por la muerte del policía. Urtecho fue desaforado a 90 días que surge el escándalo; a los 10 “mocha sueldos” actuales han pasado 5 meses y nada. Urtecho ante la contundencia de las pruebas pidió disculpas; los “mocha sueldos” de hoy cínicamente lo niegan todo.
Elena Tasso, madre de Ollanta Humala dijo: «con dos homosexuales que se fusile ya no se vería en las calles tanta inmoralidad». Parece que en el fondo nuestros jueces piensan como la sra. Tasso y pretenden que con medidas extremas van a frenar la delincuencia, teniendo en el Congreso 10 casos similares con el mismo tipo penal y ¿los condenaran a 22 años?,¿demoraran 10 años para sentenciarlos?
(*) Excongresista
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