Opinión

Dignidad para vencer o perder

Por: José Luis Gil Becerra

La accidentada segunda vuelta electoral ha revelado una ausencia de la verdad clamorosa. Los intentos por el lado de aquellos que la reclaman, solo reciben una andanada de críticas por aquellos que la ocultan, en una dinámica perversa que no ayuda al ciudadano a tener claridad sobre su propio futuro.

El país, dividido política y circunstancialmente en dos partes, cuanto más se acerca a la paridad de las votaciones, más valor le da a la mínima diferencia. La lucha por unos cuantos votos podría desencadenar una ola de violencia difícil de contener, a la luz de las demostraciones abiertas y amenazas que se vienen dando, en especial, desde el lado de los seguidores de Pedro Castillo. Las acusaciones de “golpe de estado”, mas que una manifestación o provocación, es una exacerbada mala interpretación de los seguidores de Patria Libre.

El justo reclamo de la mitad de los votantes de encontrar la verdad por parte de los que votaron por la libertad y la democracia que representa votar por Keiko Fujimori no debe ser soslayada por los seguidores de Pedro Castillo que representa el cambio de sistema hacia el socialismo, debido a que ambos tienen el mismo derecho, que, al final de cuentas, los beneficia: Por un lado si el reclamo libertario no tiene asidero, se consolida la inclinación al socialismo, y si lo tiene, la ganadora estará legitimado por la urnas.

Las circunstancias planteadas sobre indicios y evidencias que dan convicción que hay una estructura de poder que beneficia a Pedro Castillo, sumado a los hallazgos sobre firmas falsas, suplantaciones y otras microformas de variar la voluntad popular, deberían ser suficientes para cualquier país que se precie de demócrata, para iniciar acciones tendentes a absolver todas las dudas del perdedor y, así, evitar que sea la violencia la que dirima la situación.

La búsqueda de la verdad no debe ser ofensiva para nadie, por el contrario, debería ser un reto para las autoridades y un desafío para el país, porque el hallazgo de ella nos hará madurar como ciudadanos, mejorar los procesos, reparar las fallas tecnológicas como organizacionales y nos irá devolviendo la confianza entre todos, que, estoy completamente seguro, contribuirá a fortalecer la democracia en su conjunto.

De nada vale resistirse a los mecanismos que conducen a la verdad, de nada vale anteponer formalismos como insalvables para que, por desgano o impaciencia, no se llegue a ella. Si no se facilita el camino a la verdad, tendremos por mucho tiempo una mitad malhumorada y frustrada, no por haber perdido una elección a la mala, sino, haberla perdido sin dignidad.

Aún estamos a tiempo de exigirle a las autoridades para que sus plazos o formalismos no sean los hilos conducentes hacia la frustración o la violencia, sino, por el contrario, a una sociedad satisfecha, digna y pacífica, tanto en el triunfo como en la derrota.

(*) Gein y/o Ex director general de inteligencia MININTER

(*) La empresa no se responsabiliza por los artículos firmados.

Artículos relacionados

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Ver también
Cerrar
Botón volver arriba