El 29 de enero llega al Perú el señor presidente Constitucional de Venezuela don Edmundo González Urrutia, elegido ampliamente por el voto libre del pueblo venezolano.
Debemos recordar que las triquiñuelas de la dictadura chavista, truncaron la candidatura de la lideresa María Corina Machado y también de su accesitaria Corina Yoris, pero no percibieron la presencia del Embajador Edmundo Gonzales Urrutia, que con el apoyo de la Mesa de la Unidad Democrática y el activo endose de María Corina, lograron ganar largamente.
Pese a descarado fraude, finalmente salió a la luz la verdad, gracias a un meticuloso trabajo de personeros o testigos que reunieron la gran mayoría de actas originales y demostraron al mundo la derrota del sátrapa de Caracas y el triunfo de nuestro huésped.
Nicolás Maduro pretende perpetuarse en el poder a sangre y fuego, en esta especie de “todo vale” político que ha costado muchas vidas, detenciones ilegales, torturas, exilios y hostilización permanente contra los que luchan por la libertad.
El triunfo de Edmundo González Urrutia es muy importante, porque el mundo sabe y reconoce en él, al legítimo presidente de Venezuela y a Maduro como un vulgar golpista que tarde o temprano acabará preso o muerto junto con sus cómplices como Diosdado Cabello, el General Padrino y otros jerarcas, integrantes de un gobierno corrupto, violador de los derechos humanos y demostrada corrupción institucionalizada.
Este triunfo ha devuelto la esperanza al pueblo venezolano y siendo el legítimo Presidente puede hacer gestiones y pedidos que podrían derivar en una situación que ahora no vislumbramos.
La experiencia venezolana nos hace ver con nitidez, la voluntad autoritaria, fraudulenta y violenta de un régimen comunista y como las otras dictaduras, como la de Cuba y Nicaragua que convalidan cualquier barbaridad y se valen de la democracia para capturar las instituciones y el poder que no sueltan de forma alguna. En el Perú nos libramos cuando Pedro Castillo dio un golpe que fue rechazado de inmediato por todos los sectores.
Bienvenido señor presidente Edmundo Gonzales Urrutia, a esta tierra peruana, donde hace 200 años tropas patriotas al mando de Bolívar y Sucre nos liberaron del yugo español, más temprano que tarde veremos caer a los usurpadores de Miraflores y Ud. entrará en la historia como el hombre que restableció las libertades, restauró la democracia, recuperó la capacidad productiva de su país y principalmente reivindicó la decencia y la ética en la política venezolana permitiendo que millones de hermanos vuelvan a su Patria a reencontrarse con sus hijos y familiares, poniendo fin a esta diáspora impuesta por la persecución e una dictadura que mata con hambre y con balas.
Sírvase expresarle a quien lo acompañan, como nuestro querido amigo Antonio Ledesma, alcalde de Caracas, nuestros más cordiales saludos y un abrazo desde el Perú a esa heroína cívica que es María Corina Machado, quien merece recibir el Premio Nobel de la Paz. Viva Venezuela Libre.
(*) Expresidente del Consejo de Ministros.
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