Históricamente Acción Popular siempre ha dado su voto de confianza a los gabinetes desde que estos están obligados a pedirla a raíz de la Constitución de 1993, antes no era necesario. Desde el 93 a la fecha Acción Popular siempre ha hecho un voto de confianza a los gobiernos, pero me parece que esta circunstancia es diferente a las anteriores y creo que lo prudente es escuchar al gabinete para luego darle la confianza. Veo que existe ese ánimo, pero de ahí a manifestarlo o comprometerse sin escuchar la propuesta del gabinete me parece una precipitación que no ayuda mucho a la gobernabilidad, a la democracia y tampoco ayuda al papel de ser oposición de manera responsable y sin caer en el papel de obstruccionista como se quiere aducir.
El anuncio de un congresista de la bancada de Acción Popular de darle la confianza al gabinete puede desconcertar a otras bancadas. Yo insisto, los gabinetes en general, cuando son nuevos, difícilmente son rechazados. En este caso, previamente hay que escuchar al premier, de lo contrario te obliga a no ser crítico del gabinete cuando todos sabemos que hay por lo menos siete ministros que son impresentables. Esta semana hemos visto que salió Héctor Béjar del ministerio de Relaciones Exteriores, enhorabuena porque era nefasto para la cancillería.
Hay que recordar que hay dos grandes cancillerías en América Latina: Itamaratí en Brasil y Torre Tagle en Lima; por lo tanto, haber nombrado a Béjar, un personaje que no tiene ningún conocimiento del exterior, que ha sido guerrillero y que además tiene las manos manchadas de sangre, no podía tener ese cargo en una cancillería que ha tenido miembros de mucha valía. Béjar era la oveja negra de esa cancillería a lo largo de 200 años de historia republicana. Su salida es positiva pero no creo que deba ser la única. Más adelante tendrán que salir otros como el ministro de Trabajo que tiene una sentencia, el de Defensa que es sumamente cuestionado al igual que el del Interior.
La designación de Óscar Maúrtua como nuevo canciller me parece positiva desde todo punto de vista porque es un buen diplomático, es embajador de carrera. Se trata de una muestra del gobierno de que quiere mejorar en la designación de sus futuros ministros, es un buen detalle y una señal de que el señor Bellido quiere recuperar la confianza perdida.
El anuncio de un bono para 13 millones de peruanos también es una buena medida, pero también sería importante investigar qué pasó con el programa Reactiva: muchas empresas se vieron beneficiadas con un fuerte desembolso del Estado y pareciera que todavía no han devuelto ese dinero. Los bonos son buenos siempre y cuando existan recursos para ello y que no pongan en riesgo la caja fiscal, pero también sería bueno que presten atención al programa Reactiva.
(*) Excongresista de la República
(*) La empresa no se responsabiliza por los artículos firmados.
