Antauro dejó el penal Ancón II y dijo estar orgulloso del “Andahuaylazo”
Afirmó que la izquierda y derecha han fracasado y se mostró a favor de “que se vayan todos”
Su sentencia era de 19 años de cárcel, sin embargo, el Instituto Nacional Penitenciario (INPE) redimió su pena por trabajo y educación y así pudo salir tras 17 años y 7 meses de encierro. Antauro Humala, condenado por los delitos de homicidio simple, secuestro, daños agravados, sustracción o arrebato de arma de fuego y rebelión en el “Andahuaylazo”, abandonó ayer el penal Ancón II.
Tras cruzar la puerta del citado centro de reclusión, el líder etnocacerista dijo sentirse orgulloso del citado levantamiento que les costó la vida a cuatro policías.
“Nos sentimos todos muy orgullosos de lo que hicimos en Andahuaylas. Los tribunales aún no, pero los hechos nos dan la razón. ¿Dónde está el presidente con el que nos rebelamos hace 17 años? Toledo, prófugo, preso corrupto y ladrón. Kuczynski era ministro de Toledo durante el Andahuaylazo, igualito. Los que nos traicionaron entonces están por regresar a prisión. Y anteriormente nos rebelamos contra Fujimori y Montesinos cuando muchos generales firmaban el acta de sujeción”, señaló.
Además, indicó que la derecha y la izquierda han fracasado y que ante la crisis política debe asumir el Ejecutivo el sentido común patriótico. “En ese aspecto, considero que ha sido nuestra bandera desde Locumba y Andahuaylas, que esta crisis no es una crisis gubernamental, es una crisis republicana. Eso que dicen en la calle, ‘que se vayan todos’, es más cierto que nunca”, indicó, al precisar que planea viajar a Andahuaylas para agradecerle el “apoyo incondicional”, pues, dijo, regresa más fuerte que nunca.
Por su parte, su abogada, Carmen Huidobro, descartó que la salida del etnocacerista sea consecuencia de algún acuerdo político con Perú Libre, al precisar que esto se debe a la perfecta aplicación de la ley.
SE REBELARON CONTRA GOBIERNO DE TOLEDO
El 1 de enero del 2005, el mayor del Ejército (r) Antauro Humala y 150 reservistas armados tomaron la comisaría de Andahuaylas, en Apurímac. El motivo de esta acción era la caída del entonces presidente Alejandro Toledo, a quien acusaban de corrupto.
Esto generó un enfrentamiento que terminó con 17 soldados tomados como rehenes. Pero lo peor estaba por llegar, los reservistas emboscaron una patrulla del Escuadrón Verde alrededor de la comisaría y dieron muerte a los policías Carlos Cahuana Pacheco, Luis Chávez Vásquez, Ricardo Rivera Fernández y Abelardo Cerrón Carbajal. El 3 de enero Antauro fue arrestado y al día siguiente ordenó la rendición de sus hombres.
