La excandidata presidencial Verónika Mendoza podría enfrentar graves consecuencias legales tras su llamado a la “insurgencia ciudadana” durante un mitin en Cusco. El legislador Jorge Montoya, de la bancada Honor y Democracia, presentó una denuncia penal contra Mendoza por disturbios, conspiración para una rebelión, sedición o motín.
En un oficio dirigido al fiscal de la Nación interino, Juan Carlos Villena, Montoya manifestó su preocupación por la “inestabilidad social, perturbación del orden público e instigación a la violencia” que, según él, están promoviendo algunos líderes políticos, en especial Mendoza, en varias regiones del país. El legislador instó a Villena a disponer la intervención inmediata de las fiscalías de prevención del delito para evitar alteraciones al orden público y la comisión de los delitos denunciados.
La semana pasada, Mendoza reapareció en un mitin en Cusco durante la celebración de su agrupación, Nuevo Perú. En dicho evento, criticó duramente a la presidenta Dina Boluarte, calificándola de “usurpadora”. Además de llamar a la insurgencia ciudadana, Mendoza anunció su participación en las marchas convocadas para las Fiestas Patrias en protesta contra la gestión de Boluarte.
“Nadie debe obediencia a un gobierno usurpador, nadie debe respeto a leyes espurias e, incluso, esta Constitución reconoce el derecho a la insurgencia ciudadana”, declaró la excongresista. Mendoza también reiteró que no se debe rendir respeto ni pleitesía a un “gobierno mafioso” y abogó por el autogobierno basado en principios del buen vivir.
“Si nadie gobierna arriba, el pueblo se autogobierna abajo”, añadió Mendoza, subrayando su llamado a la insurgencia ciudadana y destacando la necesidad de autogobernarse ante lo que considera una gestión ilegítima.
