La liberación de Zamir Villaverde, genera bastante expectativa respecto a la información que podría tener y entregar a la justicia, al extremo que al día siguiente de su liberación tuvo un episodio confuso con policías del servicio de inteligencia, que en nombre del Ministerio del Interior le hacían seguimiento ilegal, que demuestran el miedo que existe en el entorno del gobierno sobre las revelaciones que podría destapar sus declaraciones, audios o videos.
Quisiera aclarar mi posición respecto a la importancia de la colaboración eficaz a la que se ha acogido Villaverde, porque considero que es valioso en la trama de investigación en la que está involucrado juntamente al presidente Pedro Castillo. Este artículo no pretende descalificar la investigación, al contrario, expreso una posición crítica sobre un delincuente, que ahora colabora con la justicia, para reducir su condena, siendo la única verdad.
Dicho esto, es importante analizar la información que ha estado entregando Villaverde y las declaraciones rimbombantes que ha venido ventilando a través de los medios de comunicación, en especial por Willax Tv y el programa de Phillip Butters, que se entiende son de su predilección para informar los supuestos destapes.
Lo concreto es que ya pasaron varios días desde la liberación de Villaverde y no se tiene ninguna prueba contundente que involucre al presidente Castillo, más bien se ha seguido con la narrativa del supuesto fraude en las elecciones presidenciales últimas, sin corroborar estas declaraciones con prueba alguna.
No hay nada nuevo en las revelaciones y menos la prueba contundente, que supuestamente tenía para argumentar su excarcelación. Se entiende que tal vez haya entregado a la Fiscalía como parte del acuerdo de colaboración; pero resulta inverosímil no tener la evidencia ya propalada en alguno de sus medios allegados, a sabiendas que sería determinante que se conozca los entretelones del tinglado armado con Pacheco, Silva, los sobrinos y el propio presidente.
Por todo esto y los antecedentes que tiene Villaverde, como delincuente, tengo serias dudas que posea más información a las que ya hemos tenido conocimiento y que parte de todo este show que se ha venido armando estos días, no es más que la estrategia de un farsante para rehuir a la justicia.
Un dato adicional, es la imagen errónea que pretende proyectar, que incluyen comunicados en Twitter, donde pretende justifica sus delaciones de sus compinches, por una motivación de amor al país, por la patria como literalmente ha expresado. Que no venga a ofender la inteligencia de los peruanos, Zamir Villaverde es un delincuente, que tiene antecedentes de robo a mano armada.
Reitero, la versión de Villaverde será valiosa en la investigación de todos estos escándalos de corrupción, pero que ahora aparezca como el adalid de la justicia, es una farsa, como lo es sus supuestas pruebas que evidenciarían la corrupción al más alto nivel en este desastre de este gobierno, que además oso llamarse de izquierda, siendo otro farsante más en la presidencia.
(*) Excongresista
(*) La empresa no se responsabiliza por los artículos firmados.
