Tonga sin comunicación y con agua contaminada por cenizas de volcán
Erupción fue la más grande de los últimos treinta años y nube negra impide envío de ayuda
Una imagen satelital tomada por el Himawari-8, un satélite meteorológico japonés, reveló la gran nube de cenizas que cubre la diminuta nación insular de Tonga que ha quedado incomunicada, con agua contaminada por el estallido del volcán submarino que originó un tsunami en la zona y que los dejó sin la posibilidad de poder recibir ayuda humanitaria por la negrura que cubre sus cielos.
En las imágenes por satélite se muestra la espectacular erupción del sábado por la noche, que provocó una columna de ceniza, vapor y gas que se alzaba como una seta sobre las aguas azules del Pacífico. El ruido de la erupción se escuchó hasta en Alaska.
En Tonga, provocó olas de tsunami que se estrellaron contra la costa e hicieron a la gente huir a terrenos más altos.
La erupción cortó la conexión a internet con Tonga, mientras amigos y familiares en todo el mundo trataban de ponerse en contacto con sus allegados para saber si había heridos. Incluso los sitios del gobierno y otras fuentes oficiales de información seguían sin actualizar el sábado por la tarde.
La primera ministra de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern, dijo que aún no se habían producido reportes oficiales de muertos o heridos en Tonga, aunque advirtió que las autoridades aún no habían contactado con algunas zonas costeras e islas más pequeñas.
“La comunicación con Tonga sigue siendo muy limitada. Y sé que está provocando una enorme ansiedad para la comunidad tongana aquí”, dijo Ardern. La primera ministra se comprometió a ayudar a reparar el cable submarino, si fuera necesario, y anunció el despliegue de la Marina neozelandesa.
NO PUEDEN ENVIAR VUELOS DE AYUDA POR NUBE DE CENIZAS
Se han producido daños considerables a barcos y comercios en la costa de Tonga, señaló. La capital, Nuku’alofa, quedó cubierta por una gruesa capa de polvo volcánico, explicó Ardern, lo que contamina los suministros de agua y convierte el agua potable en una necesidad vital.
Las autoridades pidieron a la población que use mascarilla y beba agua embotellada debido a la ceniza y el gas expulsados por el volcán, según agencias humanitarias.
Nueva Zelanda no había podido enviar un vuelo de vigilancia el domingo porque la nube de cenizas alcanzaba los 19.000 metros (63.000 pies) de altura, dijo Ardern, aunque esperaban volver a intentarlo el lunes (hoy), además de enviar aviones de suministro y barcos de la marina.
Un factor que complica la ayuda internacional es que Tonga ha evitado hasta ahora un brote de COVID-19. El personal militar neozelandés está completamente vacunado y dispuesto a seguir cualquier protocolo establecido por Tonga, indicó Ardern.
Es muy inusual que una erupción volcánica afecte a toda una cuenca oceánica, indicó Dave Snider, coordinador de alertas de tsunami en el Centro Nacional de Alertas de Tsunami en Palmer, Alaska, y añadió que el espectáculo transmitía “miedo y humildad”.
“AGUA ENTRÓ A CASAS Y TODOS GRITABAN”
Videos en redes sociales mostraron la irrupción del agua en Tonga a través de una iglesia y varias casas. Los testigos también describieron la caída de cenizas sobre la capital, Nukualofa. La alerta de tsunami hizo que los residentes de este país se apresuraran a ponerse a salvo en zonas más elevadas. La capital de Tonga se sitúa apenas 65 kilómetros al norte del volcán.
La residente Mere Taufa contó que la erupción ocurrió mientras su familia se preparaba para cenar. Su hermano menor pensó que se trataba de bombas explotando en las inmediaciones.
“Mi primer instinto fue cubrirme bajo la mesa, agarré a mi hermana pequeña y grité a mis padres y otros en la casa que hicieran lo mismo”, según declaraciones recogidas por el sitio de noticias Stuff.co.nz. Taufa agregó que lo próximo que supo era que el agua penetraba rápido en su casa.
“Podías escuchar gritos por todas partes, gente clamando por su seguridad, para que todos alcanzaran terrenos más elevados”, declaró. De acuerdo a los Servicios Geológicos de Tonga, las columnas de gas, humo y cenizas expulsadas por el volcán alcanzaron 20 kilómetros en el cielo. El profesor Shane Cronin, vulcanólogo de la Universidad de Auckland (Nueva Zelanda), dijo que la erupción era una de las más grandes de Tonga en los últimos 30 años.
“Es un evento bastante grande, al menos una de las erupciones más significativas de la última década”, estimó. “Lo más destacable es lo rápido y violento que se expande. Este fue más grande, más amplio y produjo mucha más ceniza. Auguro que habrá muchos centímetros de ceniza depositados sobre Tonga”, añadió el experto.
¿DÓNDE QUEDA Y CÓMO ES TONGA?
Tonga es un país polinésico de 747 km², ubicado en Oceanía y constituido por un archipiélago de 177 islas, de las cuales apenas unas 36 están habitadas. Está dentro del cinturón de Fuego del Pacífico, que es una línea imaginaria que delimita la zona del planeta más sensible a los sismos y erupciones volcánicas, por estar justo sobre la unión de placas tectónicas.
El reino de Tonga, como también se le conoce, está cerca de la colectividad de ultramar francesa de Wallis y Futuna, además de Samoa, y Fiyi. Su población apenas supera los 100.000 habitantes, los cuales en su mayoría son cristianos y hablan dos idiomas: inglés y tongano.
La monarquía parlamentaria es su forma de gobierno y su gobernante actual es el rey Tupou VI, quien asumió luego de la muerte de su hermano mayor, el rey George Tupou V, en 2012.