El temor cunde en la zona de Peralvillo, en Chancay, producto del hundimiento del terreno por las obras del megapuerto. Ayer continuaron las protestas de los vecinos en medio de la paralización de la construcción del túnel que pasará debajo de esta localidad.
El presidente del citado centro poblado, Luis Salas, indicó que ningún representante de la empresa Cosco Shipping Ports Chancay Perú S.A., a cargo de la obra, se ha acercado al lugar para dar apoyo a los damnificados.
“Recién está empezando la construcción y ya afectó a las cuatro primeras viviendas. Ahora tendrá que cruzar las próximas 940 viviendas. Pedimos que la presidenta y premier nos reunamos en una mesa de trabajo y ver cómo solucionamos este problema. Con este proyecto seremos afectados todo el pueblo”, afirmó.
