Sigue el incremento de la delincuencia: ¿policía, fiscales y jueces aplican la ley?

En nuestro país existe una inflación legislativa en el ámbito penal; pero verificamos que el sicariato, extorsión, robos de celulares, sigue en aumento y no se hace casi nada para evitarlo.

En realidad, los peruanos sentimos que estamos desprotegidos ante la grave inseguridad que vivimos, sobre todo cuando pensamos en qué momento nuestras esposas, hijos y nietos, pueden ser víctimas de los avezados delincuentes y criminales.

Esto debido a que en muchos casos, las leyes penales que sancionan drásticamente a los autores de los delitos antes referidos, no se aplican porque estos son puestos en libertad de manera ilegal por parte de algunos operadores en la administración de justicia, fiscales y jueces. Esto origina una creciente desconfianza en la ciudadanía y lo más grave: impunidad en los delincuentes, en las que los sindicados como autores o partícipes, salen en libertad para seguir delinquiendo.

Sin embargo, estas autoridades no son objeto de investigación, ni mucho de sanción alguna, cumpliéndose el adagio: “otorongo no come otorongo” pues la Junta Nacional de Justicia, el órgano de control interno de la Fiscalía y el Poder Judicial no cumplen con el rol que se les asigna.

De acuerdo a lo que viene sucediendo en los últimos días, por lo menos en Lima, matan a más de 3 personas y el robo de celulares, extorsiones, secuestros, trata de personas y niños.

La indignación de los familiares de las víctimas también se incrementa y en algunos casos, ya están aplicando la ley del talión o hacen justicia por sus propias manos, porque las autoridades encargadas por velar por nuestra seguridad, algunos de ellos no cumplen con su deber.

Inclusive se denuncia que están involucrados en graves delitos, como policías conduciendo vehículos robados, fiscales que dan libertad avezados delincuentes o involucrados en delitos, así como también algunos fiscales que archivan denuncias, pese a que existen evidentes pruebas que implican como autores a los investigados.

No esperemos una convulsión social ante la inoperancia de combatir la delincuencia.

Asimismo, la policía detiene a personas a quienes se les imputa hechos delictivos graves, en algunos a casos al ser puesto a disposición de la fiscalía, se ordena su inmediata libertad, sin una correcta fundamentación que justifique dicha medida, originando desconcierto y malestar en la policía y en la sociedad.

Comprobamos con indignación las denuncias que hacen los medios de comunicación sobre actos delictivos de algunos congresistas y funcionarios del Ejecutivo en la comisión de actos de corrupción, peculado, colusión. La Policía, Fiscalía y jueces deben aplicar la ley.

Porque justamente, los delincuentes al verificar que no les pasa nada, no solamente se han perdido el principio de autoridad, sino lo que es más grave, supuestamente, están involucrados altos funcionarios imperando la impunidad, porque no se toma medida alguna en su contra, debido a que algunas malas autoridades, también están involucrados en actos delictivos.

*Exdecano del CAL

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