“El objetivo de fondo es disolver el Congreso”

Richard Arce cuestionó el comportamiento de muchos congresistas y señaló que son cómplices de la crisis política del país, por lo cual pidió que “se vayan todos”.

POR: RAFAEL POBLETE

El pedido de cuestión de confianza presentado por el presidente del Consejo de Ministros, Aníbal Torres, al Congreso ha causado sorpresa en el ambiente político peruano. Para el excongresista Richard Arce, se trata de una “estrategia” del Ejecutivo para distraer la atención ante la llegada de la misión de la OEA. En conversación con nuestro canal digital la Noticia Perú, Arce indicó que este pedido no tiene “ni pies ni cabeza” por ser anticonstitucional.

¿Qué hay detrás del pedido de cuestión de confianza presentado por el Consejo de Ministros ante el Congreso?

Es parte de una estrategia para emplazar al Congreso porque este pedido de cuestión de confianza no tiene ningún sustento legal. Además, hay un detalle adicional, meramente formal, que se podría considerar: las cuestiones de confianza se presentan oralmente y en el Pleno; o sea, el documento es una especie de alerta para decirle al Congreso que tienen otras intenciones, pues el objetivo de fondo es la disolución del Parlamento.

¿Por qué razones no prosperaría esta solicitud de plantear la cuestión de confianza?

En temas estrictamente constitucionales no calza este pedido de la PCM dentro de nuestro reglamento jurídico, ya que el año pasado este mismo Congreso aprobó un procedimiento para plantear las cuestiones de confianza que luego fue refrendado por el Tribunal Constitucional. En un escenario en el cual es Gobierno es investigado y existen seis carpetas fiscales que comprometen seriamente en delitos de corrupción, definitivamente la única salida política para obtener ciertos réditos de la población es plantear una cuestión de confianza.

¿Cómo debería actuar este Congreso que está presionado por la población y por el comportamiento de algunos de sus integrantes?

Lamentablemente, este Congreso está descalificado y se encuentra en una situación mucho más vulnerable que la propia Presidencia de la República. El nivel de desaprobación es muy alto y, en ese escenario, si existiera muñeca política este pedido debería enviarse a la Comisión de Constitución para que se pronuncie y esperar la llegada de la misión de la OEA y demostrar que quien tiene las intenciones de disolver al Congreso es el presidente, pero no lo van a hacer porque este Congreso es muy novato y muchos reaccionan visceralmente, como ya hemos visto en muchos conspicuos representantes de la derecha extrema. Para mí, es una negligencia lo que está haciendo Aníbal Torres y ni siquiera lo ha consultado con el presidente o con el Consejo de Ministros.

¿Quiere decir que este pedido es a título personal del premier?

Tengo esa percepción.

Analizando el escenario que vivimos, ¿se podría pedir cuestión de confianza por cualquier cosa con el objetivo de cerrar el Congreso?

Eso era en el mecanismo anterior y por eso la norma de octubre del año pasado, que fue aprobada mayoritariamente, dice lo siguiente: “si son políticas de Estado, sí se puede pedir la cuestión de confianza, pero si se trata de reformas constitucionales, no procede. Repito, la propuesta de Aníbal Torres no tiene ni pies ni cabeza y debería de responderse con otro documento declarándola improcedente.

¿Qué opina de la renuncia de Guido Bellido a la bancada de Perú Libre?

Estamos frente a un desgobierno y se nota que dentro de Perú Libre hay una lucha fratricida por el poder; hay angurria y por eso en su momento Guillermo Bermejo y ahora Guido Bellido pretenden liderar sus propios espacios. Aquí veo mucho oportunismo y trae a la memoria el viejo adagio que dice: “cuando el barco se hunde…”

¿Cómo está quedando el Congreso en todo este escenario?

A los congresistas lo único que les “conviene” es cobrar su quincena y ver los negociados que ellos tienen; ojo que no estoy haciendo ninguna defensa o apología al Congreso de la República, porque muchos legisladores han sido cómplices de este Gobierno corrupto y tienen mucha responsabilidad de que este Gobierno haya nombrado a tanta gente impresentable en los ministerios. Al final, es una responsabilidad compartida y por eso la gente en la calle pide que se vayan todos.

“EL PREMIER HA QUEDADO COMO UN MISÓGINO”

Otro tema de coyuntura política que tocó el excongresista Richard Arce Cáceres fue la actitud del premier Aníbal Torres, a quien llamó “misógino” por las declaraciones contra la periodista de Cuarto Poder, Sol Carreño.

“Este pedido de cuestión de confianza podría interpretarse como una estrategia mediática para quitar la atención de la agresión cometida por Aníbal Torres contra la periodista Sol Carreño en un acto machista y misógino que lo degrada en su condición de Premier”, precisó.