“Respaldo a Lasso no debe ser porque es derecha”

• Rodríguez Mackay fue canciller durante el gobierno de Pedro Castillo. Dice que en el caso del expresidente no hubo golpe de Estado, sino ruptura del régimen democrático.

POR: ALEX VALENZUELA

El excanciller, Miguel Ángel Rodríguez Mackay, en entrevista a La Noticia, consideró que sería un error que el gobierno de Dina Boluarte respalde por una cuestión ideológica la decisión del presidente ecuatoriano, Guillermo Lasso, de disolver su Parlamento. El internacionalista precisó además las diferencias entre los mecanismos de disolución del Congreso de Perú y Ecuador.

¿Cuáles son las diferencias entre cierre del Congreso en el Perú y Ecuador?

Las diferencias son de forma y de fondo sustantivas, en el marco de la Constitución Política del Perú y de Ecuador. Por ejemplo, para que se produzca la disolución del Congreso del Perú debe producirse el cumplimiento de la figura de dos censuras de dos gabinetes ministeriales o la negación de la confianza que presenta el presidente del Consejo de Ministros. En un escenario que no se dé, entonces se produce un golpe de Estado.

En el caso ecuatoriano, el artículo 148 de la Constitución ecuatoriana es muy claro, al establecer como prerrogativa del jefe de Estado la disolución de la Asamblea Nacional, cuando, entre otros factores, el más relevante es que se haya presentado una circunstancia de grave crisis política y una conmoción interna.

¿Cuál es su impresión sobre el apoyo del gobierno de Dina Boluarte en la decisión del presidente ecuatoriano Lasso?

El respaldo al gobierno de Guillermo Lasso no debe ser porque sea un gobierno de derecha, sino porque el acto del Decreto Ejecutivo 741, se ha hecho dentro de la Constitución ecuatoriana. Ese debe ser el móvil fundamental. Y no porque se trate de un gobierno de derechas o de izquierdas.

Con el tiempo ha ido cambiando la figura de golpe de Estado.

El concepto de golpe de Estado ha sido manoseado y forzado en los últimos años. Yo pertenezco a una escuela sanmarquina, la clásica doctrinaria, que dice que para que exista el golpe de Estado tiene que haber un acto evidente de superposición, de quebrantamiento del orden jurídico, pero, además, con violencia. Por esa razón es que técnicamente, por ejemplo, lo que hubo en el caso del expresidente Pedro Castillo, no fue golpe de Estado, sino ruptura del régimen democrático, que tiene mucho más impacto, por si acaso, de conformidad con la Carta Democrática Interamericana, que prefigura qué cosa es un rompimiento, una ruptura del régimen democrático.

¿Cómo ve la reacción de la Cancillería peruana respecto a los presidentes de México y Colombia, que cuestionan la legitimidad de Dina Boluarte?

Creo que era necesario que haya una respuesta de la Cancillería, como laboratorio de la política exterior. Pero hemos debido de cuidar verbos para ir estratégicamente en el cometido esperado. Creo que la estrategia peruana, que era bajar el nivel de nuestras relaciones bilaterales, siempre diplomáticas, pero a nivel de encargado de negocios, suponía para el Perú la estrategia de mantener todo para que la Alianza del Pacífico viva.

¿Hace bien el Ejecutivo en enfrascarse en dimes y diretes con otros gobiernos?

Las vinculaciones no se condicen con la estrategia de bajar el nivel diplomático a encargado de negocios para que las cosas tengan mejores tiempos. El apasionamiento no sirve. Creo que no hemos debido retar a los gobernantes de México y de Colombia e incluso, de Chile, diciéndoles que, si no están a gusto, entonces que suspendan su permanencia en la Alianza. Cuidado con eso, porque el Perú lo que no debe hacer es poner en riesgo la supervivencia de la Alianza del Pacífico, y debe dar una respuesta mucho más dosificada y diplomática.

“LOS TUITS DE KEIKO FUERON IRRELEVANTES”

Miguel Ángel Rodríguez Mackay calificó de “irrelevantes” las opiniones de la excandidata Keiko Fujimori que, a través de sus redes sociales, criticó la intromisión de los presidentes López Obrador y Gustavo Petro en la política peruana.

“Ella, como actora política, tiene todo el derecho de decir lo que crea conveniente. Sin embargo, creo que sus participaciones resultarán en verdad irrelevantes, en términos de política exterior y de política internacional. Los actores políticos no son relevantes, si no son actores gubernamentales”, sostuvo el excanciller.