Psicología: ¿Cómo abordar la situación de una persona con trastornos alimentarios?

Los trastornos de conducta alimentaria (TCA) son un problema que ha venido en crecimiento durante los últimos años sobre todo en la población más joven. Hasta agosto de este año se han reportado más de 4300 casos de anorexia, bulimia y otras enfermedades relacionadas en menores de edad, según información del Ministerio de Salud (Minsa) y EsSalud. De hecho, el Minsa también ha reportado un preocupante crecimiento de 300% de casos de estas enfermedades en los últimos cinco años en adolescentes en el Perú.

“A pesar de que ya se registraba un alto índice de menores de edad con TCA; a partir de la pandemia, se detectaron casos de menores de hasta 11 años con alguna de estas condiciones. En ese sentido, es importante que, además del tratamiento especializado que pueda darse, las familias o entorno cercano pueda reconocer a tiempo algunas señales que manifiestan estos problemas”, indica Carlos Flores Galindo, director académico de Psicología de la Universidad de Ciencias y Artes de América Latina (UCAL).

En ese sentido y en el marco del “Día Internacional de Lucha contra los Trastornos de la Conducta Alimentaria” (30 de noviembre), el académico de la nueva carrera de Psicología de esta universidad comparte importantes datos sobre cuáles son las principales señales para detectar a una persona que sufre estas condiciones, y las formas de ofrecer ayuda desde el entorno familiar, sin estigmatizar a las personas afectadas.

Principales señales de alerta

Si bien estar delgado o delgada es una condición natural en cualquier persona, hay ciertas señales de alerta que se deberían tomar en cuenta cuando la obsesión por el físico podría convertirse en un problema mayor:

• Situación física: Es importante notar aquellos cambios bruscos en el peso, así como la tendencia a realizar rutinas exageradas de ejercicios.
• Cambios físicos productos de la mala alimentación: La desnutrición por la falta de alimentación correcta también puede presentarse mediante palidez, caída de cabello, estreñimiento, hirsutismo o crecimiento de vello a falta de grasa corporal, entre otras señales.
• Cambios fisiológicos en mujeres: En cuanto a las adolescentes se pueden generar casos de amenorrea o desaparición del ciclo menstrual durante tres meses consecutivos como mínimo.
• Cambios en la conducta: Se puede presentar aislamiento de familiares y amigos, cambios negativos en el rendimiento académico y dificultad para concentrarse. El evitar encuentros sociales es un indicador clave de este trastorno que los padres de familia podemos detectar con bastante facilidad. Los pacientes pueden presentar carácter irascible que puede llegar a situaciones de agresión, aparición de mentiras y más cambios en la personalidad.

“Detectar estas alertas a tiempo nos permitirá identificar problemas alimenticios y acudir a un especialista a tiempo. La psicoterapia de estas enfermedades permite una solución más rápida y eficaz, evitando males crónicos y otros riesgos”, señala Carlos Flores Galindo.

Recomendaciones del especialista

El equipo de tratamiento para quienes sufren algún trastorno alimentario no solo incluye a profesionales de la salud mental, un nutricionista, o médicos; sino también a familiares, amigos e incluso, la pareja del afectado.

• El tratamiento psicológico es el principal aliado para todo el proceso de recuperación de la persona.
• Es necesario escuchar y alentar la responsabilidad del propio familiar con el objetivo de que sea el mismo paciente quien pueda tener control sobre las acciones sobre su alimentación.
• La mejor forma de apoyar a una persona con TCA es tomar una acción coordinada con su terapeuta y otros especialistas. Asimismo, el hecho de insistirle que coma no va a resolver el problema.
• Servirá de mucha ayuda que quienes rodean al paciente puedan formar parte de asesorías como terapias familiares y las consultas con especialistas en salud mental. Este ejercicio permitirá conocer cómo será la interacción y sobre nuevas formas de apoyarlos durante el proceso de recuperación de su trastorno alimentario.
• No se debe dejar de lado la empatía sobre lo que el paciente debe de sentir. Frases como “sé lo complicado que es para ti, pero lo estás haciendo bien” son de mucha ayuda, dado que los TCA son una condición duradera, y puede pasar mucho tiempo para lograr los primeros cambios.

“El entorno debe participar activamente del tratamiento ya sea para el acompañamiento de la alimentación, para apoyarlos en las asistencias a citas, y sobre todo para brindar el apoyo emocional que necesitan”, sostiene el especialista de UCAL.