El aumento de contagios de COVID-19 registrados en las últimas semanas en Europa ha sido considerada una situación “muy preocupante” por la Organización Mundial de la Salud (OMS), debido al bajo índice de vacunación en grupos prioritarios en algunos países del continente.
La alta cifra de nuevos casos obedece a la “mayor presencia de la variante Delta, más contagiosa; la relajación de las restricciones y el aumento de los viajes”, argumentó la OMS.
De los 53 países europeos que pertenecen a la OMS, 33 registraron una subida del 10% en la incidencia en los últimos 14 días.
