La derecha peruana en el Parlamento, conformado por los congresistas de Fuerza Popular, Acción Popular, Renovación Popular, Alianza para el Progreso, Avanza País y Podemos, vienen actuando a espaldas del pueblo peruano; piensan que su papel en el Parlamento es detener los proyectos del Presidente Pedro Castillo y su gabinete, y ven como enemigos a los congresistas de Perú Libre.
Lo ocurrido el martes en la Junta de Portavoces es parte de una ofensiva autoritaria de frenar los principales proyectos del ejecutivo y que la mayoría de peruanos respaldó en las elecciones generales, como la nueva Constitución y Asamblea Constituyente, el ingreso libre a universidades y el aumento del presupuesto en salud y educación.
Las bancadas y los voceados para la Presidencia de las comisiones de Constitución (Patricia Juárez – Fuerza Popular), Presupuesto (Héctor Acuña – Alianza Para el Progreso), Educación (Esdras Medina – Renovación Popular), son muestras de lo que afirmamos. Sus partidos se oponen abiertamente a los cambios en esos sectores. El caso más grave es la Comisión de Educación que recaería en Renovación Popular, partido liderado por Rafael López Aliaga y que expresan posiciones conservadoras y autoritarias en educación.
Asimismo, ninguno de sus congresistas es educador a diferencia de nuestra bancada que tiene a docentes con experiencia y con propuestas en ese sector. La Bancada de Perú Libre que a la vez es mayoritaria en el Congreso con 37 parlamentarios, hemos sido elegidos democráticamente por el pueblo peruano y representamos a nuestras regiones. Cuando no permitieron participar a la lista que integramos para la mesa directiva y ahora con no respetar nuestra propuesta para las comisiones atenta contra la democracia y la voluntad popular.
La oposición tiene que entender que ellos representan a todos los peruanos y no solamente a los grandes empresarios ligados a minas, finanzas, agro-exportación y universidades privadas. Parece que no tienen la capacidad de entender las movilizaciones populares de los últimos años y las elecciones generales donde la mayoría de peruanos respaldó el Plan Bicentenario.
El Presidente Castillo a diferencia de otros presidentes no se sometió a los poderes fácticos que pedían una “hoja de ruta”, que en el fondo es sometimiento al neoliberalismo. En su mensaje del 28 de julio reafirmó sus propuestas de campaña y no traicionó a sus electores. Asimismo, formó un gabinete del pueblo y del Perú profundo liderado por el hermano Guido Bellido.
Eso no lo entiende la oposición, que no están boicoteando a Castillo o a Perú Libre, sino a todos los peruanos que votaron por cambios. Menosprecian el voto de los ciudadanos de las comunidades campesinas y nativas, ronderos, pueblos originarios, trabajadores que nos han encargado la tarea de representarlos en el Parlamento. Nosotros no traicionaremos la voluntad popular, seguiremos luchando en el Parlamento y en todos los espacios democráticos para cumplir con nuestras propuestas electorales.
(*) Congresista de la República por Perú Libre
(*) La empresa no se responsabiliza por los artículos firmados.
