Luego de permanecer internada por tres semanas en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) por COVID-19, Juliana Flores Ríos pudo dar a luz a una prematura bebé. El personal de salud de Hospital III Chimbote de EsSalud Áncash realizó una satisfactoria labor durante su atención.
La mujer, de seis meses de gestación, luchó con todas sus fuerzas para poder conocer a la hijita que estaba esperando por tanto tiempo. Primero tuvieron que estabilizarla puesto que permanecía con ventilación asistida porque sus pulmones fueron afectados por la enfermedad.
Una vez vencido el virus, la derivaron al área de hospitalización hasta que logró recuperarse y le dieron de alta. Sin embargo, una infección urinaria hizo que vuelva al nosocomio después de poco más de un mes. Al ver su situación, los especialistas determinaron que debía ser intervenida de emergencia.
Finalmente, la pequeña nació, en marzo, con 1.445 gramos de peso y 38 centímetros de altura.
