Opinión

Las relaciones de Perú y Argentina

Por: Martín Valdivia Rodríguez

“Si Argentina ya está clasificado, ahora hincho por Perú”, afirma el exfutbolista y exentrenador Óscar Ruggeri en su comentario como panelista para la cadena ESPN. A lo largo de la historia del continente, al Perú y Argentina no solo los han relacionado las guerras entre los incas y los collas, la campaña independentista de San Martín, el intercambio cultural, la diplomacia y las relaciones comerciales, sino también el fútbol. Ha habido duros enfrentamientos en la cancha, pero al final siempre se ha impuesto el fair play, las muestras de respeto y los lazos de hermandad.

La reactivación, para sacar al Perú del hoyo en que nos dejó la pandemia, no solo tiene que ser económica, sino cultural y comercial, lo que hace necesario propender al desarrollo regional en el continente. Los entrañables lazos históricos, que son la raíz de las relaciones bilaterales con Argentina, cumplirán un papel relevante en el actual contexto de consolidación de grandes espacios políticos y económicos y de necesaria integración.

Los actores Osvaldo Cattone y Fernando de Soria y el futbolista Sergio “Checho” Ibarra, por mencionar solo a algunos de los tantos argentinos que eligieron al Perú como su segunda patria, constataron lo bien que trata el Perú a los hermanos de las tierras surcadas por el Río de la Plata. Los integrantes de Los Pasteles Verdes, Julio Meléndez, el “Maestrito” Solano y otros peruanos también recibieron el cariño de los gauchos al pasar largos años en la tierra de Ernesto Sábato, Jorge Luis Borges, Soda Stereo y Maradona. Cada vez que Perú juega un partido con Argentina, los argentinos recuerdan el apoyo que les dimos en la guerra de Las Malvinas y nos llenan de elogios y muestras de agradecimiento. “A Perú jamás se le silba un himno, a sus jugadores no se les insulta y a su gente se la respeta”, exclaman.

Nuestras naciones están unidas desde sus orígenes. Esta relación cultural se mantiene vigente y facilita el desarrollo de excelentes intercambios económicos, que deberían estar acompañados y avalados por óptimas relaciones políticas. El actual Gobierno ha empezado a tender puentes con otros países. El presidente Pedro Castillo viajó a México, Estados Unidos y luego a Bolivia, para actividades que le permitieron relacionarse con presidentes, funcionarios y empresarios extranjeros, con la finalidad de estrechar los lazos bilaterales. Argentina también puede ser un aliado estratégico. Así como Ruggeri quiere ver al Perú en el Mundial de Catar, hay muchos otros argentinos que esperan que a nuestro país le vaya bien en todos los campos, especialmente el de la economía, que en estos tiempos es una prioridad. Porque lo que digo y escribo siempre lo firmo.

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