A un mes de la muerte de 17 personas en Juliaca, Puno, por el intento de la toma del aeropuerto, cientos de personas marcharon nuevamente hacia dicho terminal aéreo, pero la manifestación fue disuadida por miembros de la Policía Nacional con el apoyo de militares. La protesta dejó 23 heridos, entre ellos una menor de 11 años que recibió un balazo en una pierna.
Los manifestantes avanzaron por el bypass de Juliaca hasta los exteriores del aeropuerto internacional Inca Manco Cápac, pero gruesos contingentes de las fuerzas del orden, con apoyo de miembros del Ejército, les salieron al frente y evitaron que logren su cometido.
Un grupo de vándalos, en represalia por no poder avanzar, le prendió fuego a un galpón de un local de Las Casuarinas que pertenece a la Municipalidad de Juliaca.
La Red de Salud de San Román reportó 23 heridos durante las protestas en el aeropuerto de dicha ciudad, entre los cuales había tres con PAF (por arma de fuego). Estas personas se encuentran en el Puerto de Salud de Mariano Melgar, Centro de Salud Jorge Chávez y el Hospital Jorge Monge Medrano.
