Hoy se presentará el presidente del Consejo de Ministros, Aníbal Torres, ante el Congreso de la República para pedir el voto de confianza a su equipo de trabajo y estamos frente a dos escenarios: que se apruebe o se desapruebe. Estas dos posibilidades las tienen que medir políticamente los actores principales de esta situación: el Congreso y el Poder Ejecutivo. Aquí se está jugando el futuro del país. Lamentablemente, estamos frente a una situación en la que cada uno quiere hacer prevalecer su punto de vista, algo bastante preocupante porque se olvidan de pensar en el país y priorizan sus propios intereses, situaciones políticamente incorrectas que últimamente nos han llevado a vivir lo que estamos atravesando.
Esta figura ya la hemos vivido anteriormente con la vacancia de Martín Vizcarra que fue un derecho Constitucional del que estaba facultado el Congreso frente a los evidentes casos de corrupción, aunque después hubo propuestas fomentadas por determinadas personas que instigaron a que la gente salga a protestar sosteniendo un supuesto golpe de Estado, algo que no había sido real pues todo fue Constitucional.
Desgraciadamente, aquí nos encontramos frente a una situación en la que más priman los intereses de parte de algunos políticos que los intereses del país. Esta situación, sobre todo cuando estamos viendo actos de corrupción que es muy lamentable.
Hemos visto corrupción con Vizcarra, también con otros presidentes y ahora con Castillo; además de la clase de ministros y funcionarios que han sido designados por el presidente y los únicos que sufrimos las consecuencias somos los millones de peruanos que vivimos a diario la inseguridad ciudadana, la crisis económica insostenible y la delincuencia corrupta y la violencia violenta cada día crece más. Los políticos solo buscan su bienestar, su posición económica y sacar beneficio para ellos mismos.
Por ejemplo, la marcha del último sábado fue una situación muy clara y evidente; en una anterior oportunidad algunos medios incentivaron esta marcha; sin embargo, en esta oportunidad no ha sido así porque los medios de comunicación masiva no han intervenido como ocurrió en el 2020.
(*) Ex decano del Colegio de Abogados de Lima
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