En el colmo de la ineptitud, torpeza y prepotencia, el ministro de salud Hernando Cevallos ha señalado que para los dos partidos que le falta a Perú en las clasificatorias para el mundial de fútbol de local en Lima (Ecuador y Paraguay) no permitirá que vaya público al Estadio Nacional para alentar a la selección que se juega la tan ansiada clasificación al mundial de Catar 2022. Pero, contradictoriamente, sí permite aforo e ingresos en sitios cerrados como cines, restaurantes, bodegas, almacenes y demás tiendas. Es ridículo y paradójico todo. Los comunistas tienen el síndrome de la prepotencia, la derrota y el fracaso, es decir, aversión al éxito. Mientras que el 28 de enero Colombia nos recibirá en Barranquilla a estadio lleno (100% del aforo) el Perú contra Ecuador en Lima no tendrá un solo espectador, lo que desanimará en parte a los jugadores peruanos a luchar por la clasificación. Si tus gobernantes no te apoyan ¿quién lo hará? Esta selección de Ricardo Gareca que después de 36 años llegó al mundial de Rusia lo hizo en gran parte gracias al aliento incondicional de su público a estadio lleno en Lima.
Es cierto que la variante Ómicrón es muy contagiosa, pero felizmente no es letal. Las estadísticas, a Dios gracias, hablan que al día las lamentables muertes por el coronavirus no exceden de 25 personas (casi todas por no vacunarse). Una vida perdida es una tragedia, pero la cifra de letalidades no ha aumentado en esta tercera ola, y la gente si está vacunada no va al hospital si contrae este virus. Entonces: ¿para qué el ministro está exigiendo una tercera dosis de refuerzo con carnet acreditado, si las ridículas prohibiciones continúan? ¿acaso no sabe que los partidos de fútbol son en estadios abiertos, sin techo, donde es menos riesgoso el contagio máxime si la gente ingresa con sus mascarillas? Si se consumara dicha vergüenza de no permitir gente en el estadio para los partidos de Perú en lo que resta de las eliminatorias, seríamos el único país de Sudamérica y tal vez del mundo que fomente esa ridícula prohibición perjudicando al pueblo y al futbol peruano. Es tal la ineptitud del ministro Cevallos que no puede manejar el control sanitario de un evento deportivo. ¿Qué tiene de diferente Colombia, Chile, Venezuela o Argentina que sí permiten aforo lleno en los estadios y el Perú no? Solo la torpeza y mala fe de sus autoridades. La Federación Peruana de Futbol debería reunirse de inmediato con el “inteligentísimo” ministro Cevallos y con el presidente Pedro Castillo, parta evitar este grave error que probablemente prive a la selección peruana de volver a un mundial de fútbol (en este momento estamos en cuarto lugar empatados precisamente con Colombia).
Si Perú no va al mundial, el responsable será directamente el ministro de Salud, Hernando Cevallos, y le hará otro autogol de media cancha al gobierno de Castillo, y en su conciencia quedará ese fracaso que el hincha deportivo jamás perdonará. Ministro Cevallos, recapacite su decisión y no le haga daño al Perú. Lidere el control de la organización sanitaria deportiva.
(*) Exvicepresidente y Ex Congresista de la República
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