En estos tiempos, de tanta degradación moral y corrupción transnacional, Estados Unidos necesita un liderazgo fuerte, batallador y beligerante ante los peligros palmarios del islamo-comunismo, el progresismo, el abortismo kamalista, la inmigración delincuencial, y las ideologías subalternas que pretenden destruir a la familia y socavar la roca fundacional sobre la cual notablemente se erigió ese país, convirtiéndolo en una gran nación: Jesucristo. Por eso, Donald Trump, con esa fortaleza y autoridad que lo caracteriza (a pesar de no ser Mr. Simpatía por ningún lado) ha sido el único presidente que le paró los machos al dictador asesino norcoreano Kim Jong-un, le dio su dosis tranquilizante a Putin y le propinó plomoterapia al criminal iraní Qassem Soleimani, lo cual no es poca cosa en un ámbito internacional sumamente hostil. Trump, inspira respeto y Biden lástima. Los electores subliminalmente lo saben y lo proyectarán en la urna de votación.
Me atrevo a profetizar por este medio, la grave crisis económica norteamericana que vendrá a partir del 2025 y que será peor que la gran depresión de 1929. La fecha en la cual, estoy anunciando esto, es octubre 2024, así que tomen nota y precauciones nuestros amables lectores respecto a la retaliación económica que podría venir al Perú, producto del “Milton” económico y el desgobierno demócrata. Cero gastos, cero deuda y ahorro preventivo es tarea prioritaria. Según nuestro análisis, los terribles indicadores macroeconómicos norteamericanos, como la deuda trillonaria, la emisión brutal de dinero inorgánico, la tasa de desempleo, la depreciación del dólar, la recesión asolapada y el falseo de datos económicos, dan soporte a esta profecía. Donald Trump tendrá que lidiar con esta gravísima crisis económica que conmoverá otra vez a su nación, y a tal vez a medio planeta. !!!¡Estamos advertidos!!!
En lo que respecta a la elección de noviembre, se está produciendo una situación relevante. Los independientes son los que de manera aluvional se están decantando en las últimas horas por los republicanos y faltando 15 días, crecen exponencialmente en estados clave. Las razones, según la masiva percepción psicológica gringa, es que Trump maneja muchísimo mejor la economía, la inmigración descontrolada y la seguridad internacional ya mencionada en capítulo aparte.
Además, el respaldo de Elon Musk, es vital. La tecnología futurista y las criptomonedas, atraen al electorado milenial, que inflará de votos al republicanismo. Solo esperamos que no haya un gran fraude sistemático institucional tipo Maduro, muy común en países socialistas, donde apenas obtienen el poder no lo sueltan jamás.
El futuro de Estados Unidos y la civilización occidental democrática está en juego. Por ello, nos atrevemos a predecir que, a pesar de todo, Donald Trump será electo presidente de los Estados Unidos. El tiempo lo dictaminará.
*Analista político.
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