El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, fue dado de alta ayer luego de permanecer cuatro días internado en un hospital de Sao Paulo debido a una obstrucción intestinal, que le causó dolores abdominales y un ataque de hipo.
Bolsonaro ingresó al Hospital Vila Nova Star tras ser trasladado desde un centro médico ubicado en Brasilia, donde fue hospitalizado luego de presentar las dolencias.
Los especialistas consideraron someter al jefe de Estado a una intervención médica de emergencia, pero al final optaron por aplicar un tratamiento conservador que dio buenos resultados en su organismo.
