Las vueltas que da la vida. El 24 de diciembre del 2017, justo en la víspera de Navidad, el entonces presidente Pedro Pablo Kuczynski, le concedió el indulto humanitario a Alberto Fujimori, condenado por delitos de violación de derechos humanos y corrupción. Fuerza Popular, con Keiko Fujimori a la cabeza, trató de boicotear las gestiones que hacía su hermano menor, Kenji, para lograr el indulto. Y cuando Kenji lo consiguió, su hermana mayor lo trató de “traidor” porque la libertad de Fujimori era una de las promesas de su campaña, en caso hubiera salido elegida presidenta. Ahora, el partido fujimorista apoya y aplaude el indulto que hace cinco años rechazó.
Corría el 12 de diciembre del 2017 cuando el gobierno de PPK designó a la junta médica que evaluaría las condiciones de salud de Fujimori para determinar si podía ser indultado. El 15 de diciembre, el Congreso aprobó la admisión de la moción para iniciar el proceso de vacancia contra PPK por presunta incapacidad moral —por sus vínculos con Odebrecht— y se fijó el 21 de diciembre para la votación.
Según informó la prensa en ese entonces, Keiko Fujimori y los integrantes de la bancada de Fuerza Popular estaban enterados del proceso de indulto humanitario que había emprendido Kenji con PPK.
Fue entonces cuando Keiko Fujimori dispuso, a través del chat “La Botika”, votar a favor de la vacancia, lo que implicaba echar a perder los esfuerzos de su hermano Kenji por lograr que su padre consiga la libertad. Por esa razón Kenji y otros 9 congresistas decidieron desacatar la disposición de su hermana mayor y formaron lo que denominaron “bancada Avenger”.
Congresistas de Fuerza Popular dijeron, en aquel entonces, que Keiko les había dicho que Kenji los había traicionado, que había canjeado la libertad de su papá a cambio de no votar por la vacancia de PPK. Luz Salgado, Francesco Petrozzi y otros fujimoristas también acusaron de “traidor” a Kenji, quien actualmente, incluso, enfrenta un proceso por las irregulares gestiones que hizo por ver libre a su padre.
Si Keiko apoya ahora el indulto de su padre, estaría haciendo lo contrario a lo que dispuso en el 2017, cuando le concedieron dicho beneficio carcelario gracias a las gestiones de su hermano menor. Esa sería la razón por la que ayer la hija mayor de Fujimori no se pronunció sobre la decisión del Tribunal Constitucional de validar el indulto que logró su hermano Kenji.
Ahora por la liberación del exmandatario Alberto Fujimori se vienen vientos huracanados en la política nacional y un nuevo escenario de violencia nos depara. Porque lo que digo y escribo siempre lo firmo.
