Particular

Chankillo: Perú tiene un nuevo patrimonio de la humanidad

Unesco reconoció al observatorio solar como sitio arqueológico de carácter excepcional para la herencia de los habitantes del planeta

En la víspera del Bicentenario, el Perú logró un nuevo reconocimiento mundial que le pone marco a tan importante efeméride. Luego de una minuciosa deliberación a cargo de reconocidos especialistas, la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) decidió distinguir a Chankillo, el observatorio solar más antiguo de América, ubicado en Casma, provincia costeña de la región Áncash, como patrimonio de la humanidad.

Este nuevo galardón para nuestro país se consiguió luego de una intensa lucha consistente en prolijas investigaciones y persistentes gestiones que permitieron sustentar la importancia de Chankillo. El día previsto para evaluar la postulación del observatorio solar peruano era el lunes 26 por la mañana (hora de Perú), pero la decisión se postergó para el martes 27. El suspenso creció al ritmo de la emoción.

Desde días antes, el pueblo de Casma, tierra de Valeriano López, las ruinas de Sechín y la paradisiaca playa Tortugas, se mantenía a la expectativa. En la Plaza de Armas de esa ciudad, con los ojos clavados en una pantalla gigante, orgullosos casmeños estaban al tanto de las incidencias en la sede de la Unesco, en China.

Los amantes de la cultura, arqueólogos, antropólogos, historiadores, periodistas e intelectuales en general, también revisaban las redes sociales a la espera de la importante decisión. Ayer por la mañana, cuando llegó el momento, el ministro de Educación de China, Tian Xuejun, quien presidió la mesa, consultó si había objeciones u observaciones. Como era de esperarse, no hubo ninguna.

MINISTRO DE CULTURA

Al no haber ningún reparo, Chankillo fue declarado de inmediato Patrimonio Mundial y acto seguido la Unesco procedió a felicitar al Perú. Entonces apareció un video donde el ministro de Cultura peruano, Alejandro Neyra, en su último acto de trascendencia en su gestión, celebró la distinción y declaró que el nombramiento del observatorio “contribuye a fortalecer la identidad nacional”.

La candidatura de Chankillo estaba pendiente desde 2020, cuando la Unesco se vio forzada a cancelar su cita anual por las condiciones sanitarias mundiales derivadas de la pandemia. Recién ahora se pudo realizar la calificación y tomar la decisión en la cuadragésimo cuarta sesión del Comité del Patrimonio Mundial de la Unesco, que se realizó en la ciudad de Fuzhou, en China.

El logro se dio luego de ocho años de espera. La lucha por la distinción se inició en el 2013, cuando el Ministerio de Cultura presentó formalmente la solicitud ante la Unesco. Patrimonio de la Humanidad o Patrimonio Mundial es el título conferido por la Unesco a sitios específicos del planeta (sean bosque, montaña, lago, laguna, cueva, desierto, edificación, complejo arquitectónico, ruta cultural, paisaje cultural o ciudad) de carácter excepcional para la herencia común de la humanidad.

SUS ORÍGENES

Situado cerca de la costa, en la provincia de Casma, en la región Áncash, el observatorio se distribuye en tres sectores que cubren unos cuatro kilómetros cuadrados en los que se hallan trece torres, un templo circular y una plaza, construidos con tierra y barro.

Los investigadores apuntan a que en el complejo arqueológico de Chankillo se llevaron a cabo observaciones astronómicas directas entre los años 500 y 200 antes de Cristo, siguiendo el movimiento anual del sol para regular festividades religiosas y otros eventos estacionales.

SITIO ÚNICO

La importancia de este impresionante sitio arqueológico radica en que se trata del único a nivel mundial que, a diferencia de otros antiguos observatorios, abarca la totalidad del ciclo solar del calendario anual. Chankillo reúne singulares valores astronómicos, arquitectónicos paisajísticos y científicos.

Su excepcional emplazamiento en el borde del valle de Casma lo identifica como un oasis agrario. Además, se integra con la cordillera de los Andes como expresión de la medición del tiempo a través del paisaje.

ANTIGUO PERÚ

Según el director del proyecto Chankillo, el arqueólogo Iván Ghezzi, el sitio arqueológico cumplía una función de gran envergadura en el Antiguo Perú tras su construcción hace 2 mil 300 años.

“En el Antiguo Perú se medía el tiempo y las estaciones por la posición de los astros, especialmente por el sol. Los solsticios y equinoccios son momentos clave del año solar que marcan el paso de las estaciones”, sostiene. Asimismo, sostuvo que, en el observatorio, por ejemplo, el equinoccio se aprecia perfectamente mediante la salida y puesta de sol entre las Torres 6 y 7. “La observación del equinoccio en Chankillo demuestra la importancia de la astronomía para los antiguos peruanos”, afirmó Ghezzi.

NUESTRO PAÍS CUENTA CON TRECE LUGARES RECONOCIDOS

Con el observatorio solar de Chankillo, Perú suma 13 lugares catalogados como patrimonio mundial por la Unesco por su importancia cultural o natural excepcional para la herencia común de la humanidad.

Los lugares peruanos que tienen esta distinción son: santuario histórico de Machu Picchu, Ciudad del Cusco, Parque Nacional del Huascarán, sitio arqueológico de Sechín, zona arqueológica de Chan Chan, sitio arqueológico de Chavín, Parque Nacional del Manu, centro histórico de Lima, Parque Nacional del Río Abiseo, líneas y geoglifos de Nazca y Pampas de Jumana, Qhapaq Ñan (Sistema Vial Andino), centro histórico de la ciudad de Arequipa, Ciudad Sagrada de Caral-Supe y observatorio solar de Chankillo.

Related Articles

Agregue un comentario

Su dirección de correo no se hará público. Los campos requeridos están marcados *

Back to top button