En la era actual, el quinto jinete del Apocalipsis es, de acuerdo con una conocida revista internacional, nada menos que la desinformación. La desinformación puede traducirse en el uso deliberado de información falsa para sustentar una posición política.
Por ejemplo, la imputación del déspota ruso Putin cuando afirma que su invasión de Ucrania tiene por objeto deponer el gobierno neonazi de Zelensky, cuando está bien claro que el neonazi es, en todo caso, el propio Putin, quien asesina a sus opositores, gana elecciones con fraude y ha sepultado las libertades públicas en su país.
También puede reflejarse en la ignorancia de quienes hoy intervienen y opinan con absoluta libertad en las redes sociales, basándose en la desinformación y con total irresponsabilidad. Como lo dijo sin ambages Umberto Eco: “Las redes sociales le dan el derecho de hablar a legiones de idiotas que antes hablaban sólo en el bar, después de un vaso de vino, sin dañar a la comunidad. Entonces eran rápidamente silenciados, pero ahora tienen el mismo derecho de palabra que un Premio Nobel”.
La desinformación también se manifiesta cuando, por ejemplo, una agencia encuestadora, sin ética, publica encuestas en las que señala que los personajes han sido presentados para medir su popularidad “con cartilla” sin explicar qué significa tal cosa. No aclara que quienes no tienen sus nombres en la cartilla no van a aparecer en la encuesta de ninguna manera.
Tampoco explica que, si su margen de error es del 3 por ciento, el resultado puede colocar a la persona cuya popularidad se está midiendo tres puntos hacia arriba o tres puntos hacia abajo. O cuando la señora Boluarte pretendió ser propietaria de un solo reloj Rolex, comprado con los ahorros de toda su vida, y resulta que eran varios relojes de esa misma y muy cara marca, los cuales le había “prestado” su wayki Oscorima para que pudiera representar debidamente al Perú en el extranjero. ¡Qué argumento!
Felizmente, como dijo Lincoln: “Se puede engañar a todo el mundo algún tiempo. Se puede engañar a algunos todo el tiempo. Pero no se puede engañar a todo el mundo todo el tiempo.” ¡Luchemos para que así sea!
(*) Presidente de Perú Acción
Presidente de Consejo por la Paz
