El abogado procesalista y constitucionalista Wilber Medina Bárcena aseguró que las declaraciones de Jaime Villanueva, exasesor de la ex fiscal de la Nación, Patricia Benavides, revelan la existencia de una presunta organización criminal en el Ministerio Público (MP) que tendría como líderes al director de IDL- Reporteros, Gustavo Gorriti, y al fiscal supremo Pablo Sánchez.
“Gustavo Gorriti sería el jefe operativo, y el jefe formal sería Pablo Sánchez. Por encima de Sánchez estaría Gorriti. Pablo Sánchez es un mueble. Gorriti estaría haciendo lo que hacía (Vladimiro) Montesinos, lo que me lleva a la conclusión de que admiraba a Montesinos. Está repitiendo exactamente el mismo patrón que, siniestramente, sin tener ni ejercer un cargo, puede tener el control absoluto y tener subyugados a, por lo menos, las principales autoridades del Ministerio Público (MP). Se ha dado cuenta que instrumentalizando el MP puede acabar o por lo menos sacarse del camino a sus adversarios ideológicos”, declaró a La Noticia.
Para Medina Bárcena, como toda organización criminal, esta que se habría enquistado en el MP tiene niveles y en el escalafón más alto estarían Gorriti y Sánchez. En el segundo, dice, estaría Rafael Vela y en el tercer nivel José Domingo Pérez que además tiene —dijo— un brazo mediático.
El abogado explicó, además, que Gorriti habría incurrido en los siguientes presuntos delitos: prevaricato, usurpación de funciones, encubrimiento, delito contra fe pública “porque él ha sido el ideólogo para armar los casos, para crear los famosos delatores o los que se acogen a la confesión y todos ellos han sido coaccionados”, también tráfico de influencias y “todo eso en organización criminal que tiene una condena no menor de 15 años ni mayor de 20 años de prisión”.
