Con una sonrisa a flor de labios y saludando a la hinchada en el aeropuerto internacional Jorge Chávez, el futbolista peruano danés Oliver Sonne, llegó ayer a Lima y demostró entusiasmo por unirse a la Bicolor. Algunos hinchas lo llaman ahora el “Vikingo de los Andes”.
El lateral del Silkeborg, de la Super Liga de Dinamarca, fue recibido por Franco Navarro, gerente de selecciones de la FPF, y luego acudió a Migraciones, en Breña, donde recibió su pasaporte.
Después se dirigió al hotel donde concentran los convocados. Hoy se unirá a los entrenamientos en la Videna. Aunque el idioma es un inconveniente, se resolverá con ayuda de sus compañeros.
“Lo vamos a recibir con los brazos abiertos, como lo recibimos en su momento a Lapadula y Benavente. Los recibimos siempre con los brazos abiertos, mostrándonos tal cual como somos, mostrándoles un poco de la cultura, la mítica del jugador peruano. Por lo que he estado escuchando, se va a dificultar un poco, porque creo que no habla español, pero voy a sacar mis clases de ‘verb to be’”, expresó Yoshimar Yotún, tras el entrenamiento de ayer.
En tanto, Paolo Guerrero también arribó ayer a Lima desde Quito.
Después de liderar a LDU a clasificar para la final de la Copa Sudamericana, su club lo liberó por una sobrecarga muscular, pero que no es nada grave. Mientras, en su cuarto de día de prácticas, los seleccionados hicieron ayer trabajos físicos y con balón.
Luis Advíncula, Pedro Aquino y André Carrillo se unieron al grupo principal con miras a los duelos contra Chile y Argentina, este 12 y 17 de octubre, respectivamente, por las Eliminatorias al Mundial 2026.
