Nueva York se ha convertido en la primera ciudad de Estados Unidos en anunciar que obligarán a mostrar una prueba de vacunación contra el COVID-19 a las personas que deseen ingresar a un restaurante, una sala de conciertos o un gimnasio.
“La gente va a recibir un mensaje muy claro: si quieres participar plenamente en nuestra sociedad, tienes que vacunarte”, anunció el alcalde, Bill de Blasio. Con esta medida, la ciudad busca impulsar la campaña de inmunización, que se ha ralentizado en los últimos meses por la negativa de muchos ciudadanos.
