Sherezade y los cuentos de “Las mil y una noches”

De autores anónimos, “Las mil y una noches” es una gran colección de cuentos de origen indio, árabe y persa, compilados a lo largo de varios siglos. Quien los narra, es una de las protagonistas, Sherezade, cuya historia es fascinante.

Según el relato, cuando el sultán Scharir descubrió que su esposa le era infiel con uno de sus sirvientes, ordenó degollarla a ella y a todos sus esclavos. Sin embargo, su venganza no terminó ahí, pues dispuso que le lleven cada día una virgen para desposarla y luego la decapitaba.

Ya había mandado matar a tres mil mujeres. Una tarde como de costumbre, el sultán ordenó a su visir (asesor) que le llevara una joven. Por más que buscó, el visir no encontró ninguna.

Regresó a su casa afligido, temiendo ser degollado por no cumplir la orden del sultán, pero su hija mayor, Sherezade, al verlo tan preocupado, le propuso que la llevara a ella. La bella Sherezade le pidió al sultán como último deseo narrarle un cuento a su hermana Dunyazad.

Pero Sherezade antes del alba interrumpió el relato y le pidió al sultán continuar con la narración al día siguiente, pues se encontraba muy cansada. El sultán aceptó, pues le había fascinado tanto el relato que deseaba oír el final. Al día siguiente le concedió algunas noches más.

Con esta argucia, Sherezade logró intercambiar una noche de su vida por un cuento incompleto, hasta llegar a mil y una noches. Entonces, Sherezade le pidió al sultán que le perdonara la vida. Él aceptó, pues había quedado impresionado por las historias y prendado de los encantos de la joven.

Finalmente, el sultán se casó con Sherezade y vivió con ella hasta el final de sus días. Desde entonces, la tradición nos habla de que Sherezade es la narradora principal de los relatos titulados: “Las mil y una noches”. Así es como nacieron “Aladino”, “Alí Babá y los cuarenta ladrones” y “Simbad el marino”, entre otros.