Salen a la calle sin respetar la cuarentena
Ambulantes dicen "tenemos que trabajar para no morir de hambre"
Personas que salen a comprar en grupo, mujeres con niños menores de edad en brazos, decenas de vendedores ambulantes en las afueras de los mercados y pasajeros de buses sin protector facial. Todo esto se observó en las calles de diversos distritos de la capital, donde se constató que miles de peruanos no respetan las medidas dictadas Gobierno para disminuir los contagios y muertes por el COVID 19.
«Tenemos que trabajar para comer, sin alimento no podemos vivir nosotros ni nuestros hijos. Preferimos morir luchando contra el COVID, trabajando, que morir de hambre en nuestras casas», expresó un comerciante informal en la avenida Grau, en La Victoria.
CAMINAN EN GRUPO
En la avenida Pachacútec, en el distrito de Villa María del Triunfo, se vio a varios vendedores ambulantes que no solo ofrecían productos de primera necesidad, sino también ropa y diversos accesorios para el hogar o de uso personal. «Tenemos que trabajar, qué hacemos si no trabajamos. Hay que pagar agua, luz y la comida», se excusó una comerciante.
Igual situación se vivió en el Callao, donde señoras con sus hijos en brazos y algunas acompañadas de otras personas iban al mercado para hacer sus compras, pese a que está prohibido transitar en grupos. «La gente no respeta la cuarentena. Solo queda cuidarnos nosotros mismos», dijo una compradora en el mercado El Álamo, en el primer puerto.
A PUERTA CERRADA
En Mesa Redonda también se vio a decenas de compradores e incluso los llamados ‘jaladores’ ofrecían sus artículos y conducían a los ocasionales compradores a tiendas que atendían a puerta cerrada.
Lo mismo se vio en las calles de San Juan de Lurigancho, donde ambulantes se apoderaron de las afueras de algunos mercados. También se observó a algunos pasajeros sin protectores faciales al interior de los buses.
