Sada Goray al penal Santa Mónica y Mauricio Fernandini a Castro Castro
Pasarán 30 meses de prisión preventiva, pero les podrían dar más de 15 años
Atrás quedaron las fastuosas fiestas con conjunto criollo en las que bailaban marinera y brindaban con los mejores licores. Ahora el panorama para ambos es sombrío, como la celda en la que pasarán dos años y medio mientras son investigados. La empresaria Sada Goray será internada en el penal Anexo Mujeres de Chorrillos (ex Santa Mónica) y el periodista Mauricio Fernandini en Castro Castro.
Ayer, ambos fueron trasladados a la carceleta del Instituto Nacional Penitenciario (INPE), en el penal de Ancón II, a la espera de ser derivados a las cárceles donde cumplirán internamiento.
Cerca de las 11:00 a.m., ambos, junto con Pedro Arroyo y Roger Gavidia, exdirector del Fondo Mivivienda y exjefe de la Superintendencia Nacional de Bienes Estatales (SBN), respectivamente, todos enmarrocados, abandonaron la carceleta de la sede del Ministerio Público, en la Av. Abancay, en medio de un gran resguardo policial.
Sada Goray, luciendo una chompa rosada abierta y con el rostro desencajado, abordó una camioneta de la División de Seguridad de Penales (Divsepen) de la Policía Nacional. Mientras que el periodista y los dos exfuncionarios fueron trasladados en una furgoneta del INPE.
Por la tarde, esta entidad informó que Fernandini, Arroyo y Gavidia, fueron clasificados al penal Miguel Castro Castro, y Goray al Anexo Mujeres de Chorrillos. Hasta el cierre de esta edición, no eran trasladados.
El jueves, tras dos días de exposición, el juez Raúl Justiniano dictó 30 meses de prisión preventiva para los cuatro investigados por el presunto copamiento en el Fondo Mivivienda y otras entidades estatales durante el gobierno del exmandatario Pedro Castillo.
PERIODISTA ESTÁ CON EL AGUA HASTA EL CUELLO
Según la Fiscalía, Sada Goray, a través de Mauricio Fernandini, entregó S/5.4 millones a Salatiel Marrufo, exjefe del Gabinete de Asesores de Vivienda, a cambio de que su compañía, Marka Group, se adjudique proyectos inmobiliarios en el sector.
Para el juez Raúl Justiniano, el periodista fue quien inició los hechos delictivos porque se encargó de contactar, en agosto de 2021, al entonces ministro de Vivienda, Geiner Alvarado, para así favorecer a Sada Goray con contratos. “No soy un delincuente, soy un hombre de bien que se ha equivocado”, había declarado Fernandini.
