Se ha demostrado de extremo a extremo a lo largo de la historia que la receta comunista y socialista no ha funcionado ni lo hará, que el discurso en el que se promete sacar de la pobreza a los pueblos oprimidos por el capitalismo es un ventarrón chino que pasa cual plaga egipcia y arrebata hasta la dignidad del cándido ciudadano, llevándose consigo además la libertad de todo un país o estado.
¿Pero por qué en pleno siglo XXI siguen surgiendo estos falsos mesías? La respuesta es simple, la manipulación. Ésta se ha desarrollado a lo largo de la historia del ser humano, y siempre ha tenido la justificación perfecta, la debilidad de las masas, la división basada en utopías marxistas, estalinistas o maoístas, introduciendo los 10 puntos del manifiesto comunista por la razón o la fuerza. No se busca la solución, sino la repetición de dogmas hasta calar en la necia conciencia colectiva, hasta hipnotizar a las masas.
En nuestro país el 11 de abril del 2021 será recordado como el día en el que la herida dejada por el terror que causó Sendero Luminoso y el MRTA volvió a sangrar, reviviendo el dolor, el miedo, la desconfianza y el caos. Es algo que siempre estará latente mientras exista caudillos que se venden en cuerpo y alma a la corrupción, la misma que sirve de caldo de cultivo para los extremistas que formados en base a ideologías comunistas se han mimetizado al punto que han logrado acorralar al débil estado democrático, tal es el trabajo que han realizado
que es la población enfrentada entre sí y sus instituciones, que los justifica sin mediar oportunidad a réplica. Nos encontramos en medio de una segunda vuelta electoral, con un virtual nuevo congreso fragmentado e invadido por quienes en un momento hicieron de verdugos de esa población que decían representar y defender.
No, señores, no debemos ser pesimistas, nuestro país y compatriotas somos sabios, el instinto de supervivencia está más fuerte que nunca, hemos superado circunstancias trágicas, hemos estado al borde del colapso, nos hemos unido y los hemos derrotado, esta vez no será la excepción, tenemos entre nosotros a nuestros héroes que lograron paz y libertad para nuestro Perú, conocemos al enemigo y nos conocemos, por qué temer al resultado si el cuento ya lo hemos vivido y la bruja ha sido derrotada junto a sus pulgas malolientes y desgraciadas.
(*) Abogada especialista en Gestión y Políticas Públicas
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