Diez días después del derrame de petróleo de la empresa Repsol en La Pampilla, cuyos daños se han expandido hasta Huaral y ha causado la muerte de peses y aves, contaminación en playas y pérdida de trabajo de miles de familias, se reportó un segundo derrame de crudo en la zona donde empezó el desastre ecológico.
El Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (Oefa), la Marina y el Organismo Supervisor de la Inversión en Energía y Minería (Osignermin) confirmaron la visualización de nuevas manchas oleosas desde el 25 de enero. Por su parte, el procurador público del Ministerio del Ambiente, Julio César Guzmán, informó que el nuevo derrame será incorporado en la misma carpeta de investigación criminal sobre el primero.
“Al parecer -y esta es una de las líneas de investigación de este nuevo hecho- es que, producto de la limpieza del ducto se ha escapado una cantidad significativa de petróleo nuevamente que vuelve a afectar las zonas que estaban de alguna u otra manera controlada a partir de la semana pasada”, expresó.
Sin embargo, Repsol adujo que no se trata de un nuevo derrame, sino “afloramiento controlado de remanentes del derrame del pasado 15 de enero”.
