Opinión

Periodistas y comunicadores (I)

Por: Martín Valdivia Rodríguez

¿Un periodista es necesariamente un comunicador? ¿Un comunicador es necesariamente un periodista? ¿Se deben enseñar estas carreras juntas en las universidades? Si hay un Colegio de Periodistas, ¿es necesario crear uno de comunicadores? Son preguntas que hoy, cuando no solo el periodismo, sino muchas otras carreras profesionales se han ramificado, nos hacemos quienes nos dedicamos a este oficio.

Ricardo Burgos, actual decano del Colegio de Periodistas de Lima, en entrevista con nuestro canal digital La Noticia Multimedia, puso el tema sobre el tapete. Este es un asunto que reviste gran importancia e interés para nuestro gremio, cada profesional del medio debe analizar el tema y tener su propia posición.

Para abordar el asunto es necesario, primero, establecer las diferencias entre las dos funciones de estos dos profesionales que ahora están marcando distancias entre sí: los periodistas y los comunicadores. Y, segundo, cómo están ejerciendo esas funciones, sus características y con qué nivel de suficiencia profesional. En su artículo “Comunicación vs periodismo”, publicado en el medio rebelión. org, Alexandro Saco sostiene que “el periodismo se alimenta de lo periódico. Su ámbito se restringe a lo que en teoría llama la atención del público al que se dirige, carece de profundidad, es inmediato y se piensa que se puede ejercer como cualquier otra actividad. La comunicación por el contrario puede incorporar tiempos y espacios lejanos, traspasar la línea informativa entregando un panorama mayor de los hechos presentes”.

Un evidente error de concepción el de Saco, pues limita el periodismo a la difusión de información periódica. Cuando en realidad el periodista no solo informa, sino también investiga, analiza e interpreta la realidad. El desarrollo de géneros como la crónica, el ensayo y el mismo periodismo de opinión precisan de esas actividades, que van más allá del reporte de noticias del día.

El perfil de un comunicador contemporáneo, en cambio, es más tecnologizado, tiende a enfocarse en medios audiovisuales, prioriza la digitalización y, con esta, da mayor importancia a la inmediatez, a lo preliminar y a lo superficial, soslayando la profundidad y amplitud del conocimiento respecto al hecho noticioso. Esta diferencia se puede observar claramente en los objetivos de un comunicador de hoy y un periodista de ayer, hoy y mañana. El primero, por lo general, busca más likes; el segundo, en cambio, busca lectores. Mañana continuamos con este interesante tema. Porque lo que digo y escribo siempre lo firmo.

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