El destituido expresidente, Pedro Castillo volvió a pronunciarse mediante una audiencia sobre la tutela de derechos y sostuvo que fue víctima de “tortura” en el momento cuando guardias del orden lo estaban deteniendo por el fallido estado de golpe del 7 de diciembre.
Luego de 10 meses transcurridos, Castillo declaró en la audiencia que fue “amenazado con metralleta” cuando parte de la policía estaban interceptándolo en flagrancia ya que pretendía dirigirse a la Embajada de México en Perú.
Además, el exprofesor de escuela rural exhortó a la jueza que fue “vacado inconstitucionalmente, no he cometido ningún acto de flagrancia”.
No obstante, sostuvo que la Corte Suprema y el Juzgado de Investigación Preparatoria y Sala Penal Permanente, avaló la decisión del Congreso y la detención judicial.
Finalmente, el exmandatario negó nuevamente que estuviera envuelto en actos de corrupción rechazando pertenecer a una organización criminal.
“Si estuviera de cuello blanco, también tendría de mi lado la Procuraduría y la Fiscalía, pero no es así”, agregó.
Como es de carácter conocer, la audiencia se basó sobre la tutela de derechos que presentó el abogado de Pedro Castillo para cuestionar la detención judicial en flagrancia, para anular la investigación que se le sigue al exmandatario por rebelión y, alternativamente, conspiración. El argumento para este pedido es la supuesta tortura de la que habría sido víctima el exjefe de Estado.
