Papa Francisco sufre de crisis respiratoria e inicia tratamiento de ventilación mecánica

El papa Francisco, de 88 años y hospitalizado desde hace dos semanas por una doble neumonía, experimentó una «crisis» respiratoria «aislada» el viernes, según informó el Vaticano.
«A primera hora de la tarde (…), el Santo Padre presentó una crisis aislada de broncoespasmo que, sin embargo, derivó en un episodio de vómitos con inhalación y en un empeoramiento brusco del cuadro respiratorio», señaló la Santa Sede a través de un comunicado.
El pontífice argentino respondió positivamente al tratamiento de oxígeno y se mantuvo consciente durante el episodio. Las autoridades vaticanas comunicaron que el Papa fue broncoaspirado con prontitud y se le aplicó ventilación mecánica no invasiva, obteniendo mejoras evidentes en su intercambio de gases.
A pesar de la situación crítica, el comunicado especificó que el Santo Padre permaneció alerta y orientado en todo momento, contrarrestando las preocupaciones previas sobre su estado de salud.
Desde el informe médico anterior, donde se indicaba una mejora progresiva, se ha pasado a una situación más delicada, aunque se mencionó que ya no se encuentra en estado crítico, aunque el pronóstico sigue siendo reservado.
La hospitalización del líder espiritual en el hospital Gemelli de Roma el pasado mes de febrero generó inquietud, especialmente tras un complicado fin de semana que incluyó un severo ataque de asma y la necesidad de transfusiones sanguíneas.
Esta instancia, la cuarta hospitalización en lo que va del año, suscita dudas acerca de su capacidad para ejercer sus funciones, considerando sus antecedentes médicos como operaciones previas en el colon y el abdomen, junto con dificultades motrices. La falta de protocolos canónicos para situaciones graves que puedan impactar en su capacidad mental añade incertidumbre a este delicado escenario.