“Odebrecht contaminó la política en el país”
El excongresista Juan Pari calificó de “graciosa” y tardía la prisión preventiva ordenada contra Jorge Barata

- Juan Pari señala que sonaron las alarmas en Estados Unidos y en Brasil, pero en el Perú no pasó nada, pese a que se conocía la gravedad de la situación de Odebrecht. “Era un escándalo mundial, pero en el Perú no se actuó”, expresó.
POR CARLOS RIVERO MELGAR
El excongresista Juan Pari, quien presidió la primera comisión Lava Jato del Parlamento, en entrevista con nuestro canal digital La Noticia Perú, hace un análisis de cómo operó la empresa brasileña Odebrecht y cómo sus tentáculos llegaron a corromper a las autoridades con la finalidad de obtener grandes obras en el país.
La semana pasada el Poder Judicial ordenó prisión preventiva contra el exsuperintendente de Odebrecht en el Perú, Jorge Barata, por el caso Gasoducto Sur Peruano. Parece bastante tardía.
El caso de Barata suena hasta gracioso, o sea, pedir prisión preventiva a estas alturas, cuando a él se le dejó salir del país, nunca se intervino su oficina, su domicilio, absolutamente nada en búsqueda de evidencias aquí en el Perú; entonces, se le permitió vender sus bienes, se le permite junto a Odebrecht hacer un convenio de colaboración eficaz y salir del país. Es una situación de prisión preventiva a un personaje que tiene protección de la justicia brasileña, porque ni siquiera quiere declarar en el caso del Gasoducto, indicando que es la justicia brasileña la que tiene que autorizarle. Entonces, es un personaje que está en un país donde constitucionalmente no existe extradición, donde está sumamente cubierto por el propio sistema, por su programa de colaboración eficaz; en todo caso, nosotros debimos haber actuado en su momento oportuno. El escándalo mundial era fuerte y no se actuó, y decidir ahora una prisión preventiva resulta sumamente tardío y es ineficaz, más parece un gesto o cómo mostrar los dientes de papel, y eso no es nada bueno.
¿Considera que el acuerdo de colaboración eficaz fue demasiado benévolo con Odebrecht y sus funcionarios?
Nosotros lo vemos por los resultados y por los gestos que ha habido. No conocemos el acuerdo en sí, se ha mantenido en secreto hasta la fecha, lo sabemos por algunas cosas que se han filtrado o por el sustento que hizo la jueza para decir quien ese acuerdo se establezca un acuerdo donde se compromete los intereses del país, y que todo el país no conozca acuerdo resulta siendo totalmente irracional. Pero, en todo caso, yo considero que ese acuerdo ha favorecido mucho Odebrecht y logró con ese acuerdo, tanto algunas pastillitas con los codinomes que después ellos mismos los contaminan y dicen que no es prueba. Entonces eso ya es toda una estrategia de defensa una estrategia de cómo trataría de buscar la impunidad en el país y seguir siendo beneficiario de varias concesiones que tiene hasta ahora.
¿Cómo califica la labor que viene realzando el equipo Lava Jato con José Domingo Pérez y Rafael Vela a la cabeza?
Yo creo que, aparte de las personas, hay que abordar cómo se ha venido trabajando en el Ministerio Público en relación al caso Lava Jato. El primer tema es lo que comenté hace un momento, no hicimos ninguna intervención directa, yo recuerdo muy bien una conferencia que dio el fiscal de ese entonces, Sánchez, que indicó que aquí en el Perú no hay pruebas, hay que sacarlas de Brasil y, por lo tanto, trataban de justificar por qué no tomaban acciones concretas en el país. Ahora tenemos los temas de qué sería ni van a declarar que ya no quieren comprometerse. En todo caso, yo creo que ha habido ineficiencias desde el comienzo, confiarse solamente en la colaboración eficaz, confiarse de un delincuente que actúa con posiciones que están solamente considerando sus intereses y cómo se protegen, no está mirando que les interese el desarrollo político del país, no les interesa que en el Perú se superen los temas de corrupción… Nada de eso, a ellos les interesan sus negocios, ver cómo los salvan. ¿Cómo entonces podemos tener fe en un delincuente? Creo que la fiscalía cometió ese error.
¿Qué opinión le genera esta injerencia que habría tenido IDL de Gustavo Gorriti sobre este equipo de Ministerio Público?
Se especula bastante sobre esa injerencia. Yo creo que el Ministerio Público entiende su responsabilidad como institución, creo que ha sido un desliz muy desafortunado por parte de Gorriti de decir que Odebrecht podría ser una empresa recuperada y que podría haberse arrepentido porque se vislumbró por las llamadas colaboraciones. Creo que ese fue un error muy grave y no debería haber tenido ningún tipo de impacto en el comportamiento del Ministerio Público. No podemos estar confiando y teniendo fe en una empresa delincuencial. Ellos han contaminado la política en el país, ellos han hecho que se haga metástasis en el país y no solamente con las decisiones del Ejecutivo, también en el Congreso. Es lo que ha pasado, hay responsabilidades políticas, el tema es mucho más complejo que la intervención de una persona.
¿Odebrecht todavía tiene poder sobre algunas instituciones?
Odebrecht obviamente que está debilitada en términos de intervención, pero el poder lo mantiene, las piezas están ahí, el sistema está ahí, que puede ser aprovechado por Odebrecht o por otra empresa corrupta, el mecanismo está intacto. ¿Alguien movió o se puso a reestructurar, por ejemplo, Proinversión, donde se tomaban las decisiones claves? Recordemos que las alarmas en el Perú no sonaron en absoluto, en ningún sitio todos los sistemas de control que tenía el país sobre si ocurría o no una anormalidad en las inversiones deberían sonar, pero simplemente no sonaron las alarmas. Sonaron en Estados Unidos, en Brasil. ¿Hemos analizado por qué no funcionaron esas alarmas?
“EMPRESA ARMÓ UN SISTEMA PARA LA CAPTURA DEL PODER”
Para Juan Pari, el análisis no debe quedarse solo en las sentencias de expresidentes que se vincularon con Odebrecht. “Nos olvidamos de entender que hay todo un mecanismo que ha estado funcionando donde la empresa armó todo un sistema de captura del poder tanto. El en Ejecutivo como en el Legislativo, personajes que han tenido que intervenir y que están quedando fuera de la investigación. No nos podemos quedar solamente presentando a un sentenciado como un trofeo, hay que entender la cosa más profundamente”, señaló.